En plena época de Carnaval en Brasil, los crímenes se han incrementado en Ceará, cuyas autoridades locales han tenido que contratar seguridad privada para salvaguardar el orden durante los festejos.
El número de homicidios en el estado de Ceará, en el noreste de Brasil, ha ascendido a 122 en los últimos cuatro días de huelga que la Policía Militar esta llevando a cabo en esta región del país para exigir mejoras laborales y salariales.
En plena época de Carnaval en Brasil, los crímenes se han incrementado en Ceará, cuyas autoridades locales han tenido que contratar seguridad privada para salvaguardar el orden durante los festejos. De acuerdo con las cifras que ha recopilado el diario 'Folha de Sao Paulo', durante las fiestas del sábado se produjeron en este estado 34 asesinatos.
A los 122 crímenes de sangre que se han cometido en estos últimos cuatro días hay que sumar los que se habían producido hasta entonces, alcanzando así la cifra de 286, lo que supone 25 asesinatos más por día con respecto al mes de febrero de 2019.
Durante este fin de semana, un hombre y su hija de casi dos años fueron asesinados a tiros en su propia casa y un agente de la Policía Militar fue detenido por matar a un hombre de 21 años.
Tras varios días las autoridades locales alertando de la situación, finalmente el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, accedió el viernes a desplegar tropas de las Fuerzas Armadas por todo el estado de Ceará, tras la escalada de violencia protagonizada por los agentes en las manifestaciones.
El senador del Partido Democrático Laborista (PDL) Cid Gomes resultó herido el pasado miércoles por dos disparos cuando intentaba romper con una retroexcavadora un piquete que varios agentes de la Policía Militar habían realizado en el marco de sus protestas.
De acuerdo con el hospital al que fue trasladado, el que fuera ministro de Educación en el Gobierno de Dilma Rousseff (2011-2016), resultó herido en la región torácica, pero "sin necesidad de aparatos" para poder respirar.
Clima de tensión en Ceará. Las reivindicaciones de la Policía Militar en Ceará adquirieron un cariz de extrema violencia en la semana pasada. Un agente fue detenido por prender fuego al coche de una mujer en el municipio de Crato.
Desde que se iniciaran las manifestaciones, casi una decena de policías fueron detenidos por diversos actos vandálicos y unos 300 están siendo investigados.
El Gobierno de Ceará informó de que todos aquellos agentes relacionados con los motines y actos vandálicos serían investigados y sancionados en caso de que su implicación sea comprobada.