El ministro de Economía dijo que la medida facilitará a los empresarios la adquisición e implementación de estas factorías para la producción del insumo y su venta a YPFB.
El Gobierno boliviano aprobó este miércoles el decreto supremo que autoriza al sector privado a importar maquinarias o fábricas de biodiésel con gravamen arancelario cero.
La medida busca reducir hasta en 50% la importación de diésel fósil que realiza el Estado.
El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, dijo que la medida facilitará a los empresarios la adquisición e implementación de estas factorías para la producción del insumo y su venta a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
“Va a permitir que el sector privado pueda importar con gravamen arancelario cero, maquinaria y factorías para la fabricación de biodiésel y como también en este momento está vigente el IVA cero para este tipo de maquinarias de factorías, entonces tiene un IVA cero de importaciones y un gravamen arancelario cero para que puedan importar maquinaria, factorías para la producción de biodiésel”, explicó en conferencia de prensa.
El 6 de agosto, en su discurso por los 199 años de la independencia del país, el presidente Luis Arce anunció un programa de incentivos financieros y fiscales busca aumentar la producción de biodiésel por parte de productores privados nacionales, que se basa en un gravamen arancelario cero, que en conjunción con el actual IVA cero para importaciones de maquinaria y equipamiento para plantas de biodiésel.
Montenegro afirmó que el decreto permitirá implementar las factorías y que, en el caso de que se emplacen seis fábricas, con una inversión de hasta $us 30 millones, facilitará la producción de hasta 40 millones de litros por mes, que reducirá hasta en un 50% la importación de combustible fósil.
“Con 30 millones de dólares, hay factorías que pueden hacer 40 millones de litros de biodiésel, que eso es un mes de importación (de diésel), se puede escalar a 80 millones o 60 millones (de litros) que sería un mes de importación. Si solamente cinco o seis factorías se pudieran realizar en un plazo de ocho, 12 o 14 meses, dependiendo de la tecnología, ya estaríamos hablando de una sustitución de un 50% solamente de privados”, indicó.
Si se suma la producción que realizará YPFB con las plantas de Biodiésel I y II con tecnología FAME (biocombustible elaborado a través de la transesterificación de aceites vegetales) y la de Aceite Vegetal Hidratado (HVO, por su sigla en inglés), que se construirá próximamente, el Gobierno prevé reducir hasta un 85% la importación del combustible fósil.
De acuerdo con datos de la petrolera estatal, Bolivia comenzó a importar carburantes en 2006 y desde entonces el volumen de diésel que llega al país para su consumo interno ha crecido de 20% en ese entonces a 80% en 2024