En el primer semestre de este año, la actividad del sector cayó 45% respecto al mismo periodo del año anterior, de acuerdo al secretario general de la Cámara de Empresarios de Free Shops y Afines del Uruguay, Carlos Loaiza Keel.
Montevideo. Los free shops instalados en la frontera con Brasil están atravesando un momento desafiante, por más que el sector entiende que se trata de algo transitorio. Como consecuencia de la combinación de la depreciación del real, el sobreendeudamiento de las clases medias norteñas y la crisis política y económica que azota al gigante latinoamericano, los consumidores de ese país son más cautelosos a la hora de comprar en estas tiendas del lado uruguayo.
En el primer semestre de este año, la actividad del sector cayó 45% respecto al mismo periodo del año anterior, de acuerdo al secretario general de la Cámara de Empresarios de Free Shops y Afines del Uruguay, Carlos Loaiza Keel.
El consumo privado ha sido golpeado en Brasil. Mientras que el año pasado creció un magro 0,9% comparado con 2013 en términos reales –descontado el efecto de la inflación–, para este año se espera que caiga 1,4%, según los pronósticos del sondeo LatinFocus Consensus Forecast de FocusEconomics. La divisa brasileña, en tanto, ha perdido terreno frente al dólar de manera clara. El billete verde acumula una suba de 53,6% en el vecino país durante el último año móvil.
Pese a este escenario complejo, los jugadores del sector afirman que la suya es una apuesta a largo plazo y que han realizado inversiones millonarias que dan muestran la apuesta que han hecho por Uruguay. Como ejemplo de esto, Loaiza Keel mencionó el centro comercial Melancía en Rivera, que está próximo a su inauguración, y que tendrá dos free shops (La Riviera y Neutral) como sus tiendas "ancla".
La cámara ha solicitado al Ministerio de Economía una rebaja temporal hasta enero del canon que los productos que se comercializan en estas tiendas abonan una vez que ingresan en el depósito fiscal, paso previo a aterrizar en los estantes de las tiendas. Se solicitó que este canon –que fluctúa, dependiendo del artículo, pero que en promedio ronda el 15%– disminuya a la mitad. En la coyuntura actual, abonar este canon –previo a la concreción de la venta– se hace muy cuesta arriba, sobre todo para los comercios más pequeños, y provocó que algunos estén viendo su oferta reducida. Loaiza Keel dijo que hay antecedentes de esta medida, y que sería "oportuno" instrumentarla en este momento.
Esta situación del otro lado de la frontera, que impactó en el negocio de las tiendas ubicadas en Uruguay, generó que varias empresas tuvieran que enviar a trabajadores a seguro de paro.
"Tenemos un número importante de gente en seguro de desempleo", indicó el miembro de la comisión directiva de la gremial y titular de la cadena Neutral Free Shops en el país, Enrique Urioste.
Para mitigar los efectos de esta medida, empresarios, trabajadores y el Ministerio de Trabajo acordaron a fines de julio extender el seguro de paro a 12 meses. Urioste, si bien admitió que la volatilidad del real produjo un "frenazo importante" en la actividad de los free shops uruguayos, se mostró confiado en que la situación es "coyuntural" y que la base del negocio sigue estando. "Falta tranquilidad cambiaria para que el cliente vuelva", añadió. Para el empresario, este momento es pasajero. "Nos preocupa, pero no nos desespera", dijo. "El negocio está, hay que pasar la tormenta", concluyó.
En octubre de 2012, Brasil aprobó una ley que habilitaba la instalación de "lojas francas" (tiendas libres de impuestos) en los municipios que tuvieran "ciudades gemelas" de ciudades extranjeras en la frontera terrestre. De esta manera, a los free shops de frontera del lado uruguayo se le presentará un nuevo competidor al otro lado de la línea divisoria entre países. La disposición posibilita que en 28 ciudades brasileñas aparezcan este tipo de tiendas, 10 de ellas en el límite con Uruguay, en el estado de Río Grande del Sur. Las diferencias entre los regímenes hizo que los empresarios locales alertaran sobre este punto, debido a que perjudica a la actividad local. La reglamentación de la ley se dilató, producto de la situación en el país norteño.