Entre enero a agosto de 2019 se exportaron unas 4.513.577 toneladas, que representa una diferencia de 15,5%.
Asunción.- La disminución en las exportaciones de soja paraguaya se acrecentaron al cierre del mes de agosto, llegando a una caída de 830 mil toneladas de envío, según refiere el informe de comercio exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
Entre enero a agosto de 2019 se exportaron unas 4.513.577 toneladas, que representa una diferencia de 15,5%; es decir, que en el mismo periodo del año anterior se registraba una salida de 5.343.577 toneladas de la oleaginosa.
De acuerdo al reporte, la reducción de la producción de soja en la campaña 2018/19, a consecuencia de factores climáticos principalmente, generó una disminución del stock exportable de este rubro, lo que se vio recrudecido al cierre del octavo mes del año.
El informe señala que esta caída de los envíos de soja en grano, representa a su vez menos ingreso de dólares al país sudamericano, hecho que ejerce una presión sobre la cotización de la moneda estadounidense y genera menos dinamismo en la economía local.
En cuanto a los destinos, en estos ocho meses del año, el mercado argentino fue el principal receptor del producto paraguayo, con un 70% de participación.
Más atrás aparecen como alternativa de exportación Rusia con el 12% de participación, la Unión Europea con 10%, Brasil con 2%, Israel 1%, Turquía 1%, y otros mercados 4%.
En lo referente al ranquin de mayores exportadores de soja paraguaya, la empresa de capital chino "Cofco Paraguay International" continúa en el primer lugar, con un protagonismo del 18%.
Según la asesora de comercio exterior de la Capeco, Sonia Tomassone, el descenso de las exportaciones obedece directamente a la menor disponibilidad de mercadería existente, pero también se suman otros factores, como la navegabilidad de los ríos que redujeron el volumen de salida de la oleaginosa.
Destacó no obstante, que en la plaza interna del mercado argentino, Paraguay tiene una preponderancia del 73%, quedándose otros grandes proveedores de soja a nivel mundial como Estados Unidos (18%) y Brasil (9%), un poco más rezagados.