Las ventas externas mexicanas avanzaron 55% en la última década, incremento que duplica el avance de 21,2% de las brasileñas. Las exportaciones mexicanas de productos sumaron US$451.000 millones en el 2018, en contraste con US$240.000 millones de Brasil.
Ciudad de México. México aumentó sus exportaciones a un ritmo superior de más del doble frente a Brasil en la última década, siendo ambos los mayores exportadores de América Latina.
Las exportaciones mexicanas de productos sumaron US$451.000 millones en el 2018, un aumento de 55% frente al 2008, según datos del Inegi.
Por su parte, las ventas externas de Brasil fueron de US$240.000 millones en el año pasado, lo que representa un aumento acumulado de 21,2% en la última década, de acuerdo con datos del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de ese país.
Las ventas externas mexicanas estuvieron encabezadas por autos, autopartes, vehículos para el transporte de mercancías, computadoras y aceites crudos de petróleo.
En contraste, las principales exportaciones brasileñas comprendieron soya, aceites crudos de petróleo, minerales de hierro y sus concentrados, pastas químicas de madera a la sosa o al sulfato y tortas y demás residuos sólidos de la extracción de aceite de soya.
La orientación general de la política comercial y relacionada con el comercio del Brasil no ha cambiado durante los últimos años. Sus objetivos han sido la integración en las cadenas de valor mundiales y el aumento de la competitividad de los productos nacionales.
Pese a algunos ajustes, debido, entre otros factores, a la reciente desaceleración económica, sus programas de larga data destinados a fomentar el desarrollo tecnológico, proteger a determinados productores nacionales de la competencia externa, atraer inversiones y promover y diversificar las exportaciones no registraron cambios prácticamente.
Un reciente análisis difundido por la Fundación Getulio Vargas y la Escuela de Economía de São Paulo sobre la política comercial de Brasil analizó el proceso de liberalización ocurrido en México.
Esta apertura comenzó en la década de 1980 y tuvo como su principal episodio la ratificación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte con Estados Unidos y Canadá.
“La liberalización comercial mexicana puede ser considerada un éxito, promoviendo el aumento de las exportaciones, el crecimiento económico y el bienestar de la población. Sin embargo, la desigualdad en el país probablemente aumentó en consecuencia del proceso (a pesar de que todas las capas de la sociedad pudieron beneficiarse). Éste es un aspecto importante que debe ser tenido en cuenta por los delineadores de políticas en Brasil”, afirma el documento.
Como miembro del Mercosur, Brasil mantiene acuerdos comerciales preferenciales (acuerdos de complementación económica) con Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, India, México, Perú, la Unión Aduanera del África Meridional y Venezuela, así como un acuerdo de libre comercio con Israel.
Por su lado, México tiene suscritos 13 tratados de libre comercio con 52 países y siete acuerdos de alcance parcial en el marco de la Asociación Latinoamericana de Integración.