La Comisión Interamericana de Puertos, Gonzalo Mórtola identificó que en América Latina hay grandes desafíos y necesidades de inversión en innovación y tecnología, en una parte del mundo que en muchos casos estuvo relegada en este tipo de desarrollos.
Panamá. El presidente del comité ejecutivo de la Comisión Interamericana de Puertos (CIP), Gonzalo Mórtola, urgió este lunes en Panamá una mayor cooperación que contribuya a elevar la competitividad del sector en América Latina.
"Estamos obligados a ser competitivos, sin dejar de cooperar. Es una carrera contra el tiempo que debemos enfrentarla en equipo", subrayó Mórtola en la apertura en un hotel de la capital panameña de la IV Conferencia Hemisférica sobre Competitividad, Innovación y Logística: Tecnología enfocada en la Cadena de Valor.
En el encuentro de tres días, y que se realiza en el lugar paralelamente a la y I Reunión Latinoamericana de la Asociación Internacional de Puertos, participan representantes de 26 países, según la organización del encuentro, previsto hasta este miércoles.
Mórtola identificó que en América Latina, y en el continente hay grandes desafíos y necesidades de inversión en innovación y tecnología, en una parte del mundo que en muchos casos estuvo relegada en este tipo de desarrollos.
Señaló además, en conversación con Xinhua, la capacitación como una prioridad en la que debe invertirse, y consideró como un factor a favor la creatividad que ha habido en terminales de la región para encontrar soluciones frente a los desafíos que se presenten.
El presidente del comité ejecutivo de la CIP estimó así mismo prioritaria la inversión en sostenibilidad en el sector, y apuntó que es por ello relevante la labor que impulsa la OEA (Organización de los Estados Americanos) en la certificación relacionada con el cumplimiento de nuevas normativas, como las Iso 9001 y 14001.
Mórtola aseguró que existe inversión disponible en los puertos para la mejora de la competitividad portuaria en la región y que es clave, además de la administración adecuada de estos recursos.
Valoró igualmente el trabajo muy de cerca con otros puertos, como en el caso del puerto de Rotterdam, cuya relación reconoció que fue importante en el desarrollo de la política portuaria argentina.
Jorge Durán, secretario de la CIP, identificó por su parte como principales retos para elevar la capacidad portuaria en América Latina, las consideraciones ambientales, y en esa línea el cumplimiento del Marpol, que resaltó como un acuerdo hecho por la Organización Marítima Internacional (OMI), y que se refiere a acciones para prevenir la contaminación de los buques.
Explicó que si un puerto no cumple con requerimientos que tienen que ver con el manejo de desechos, de aguas y inclusive con las emisiones de los buques, es probable que un agente decida enviar un barco a otro terminal que sí cumple.
Durán observó que la mayoría de los puertos en América Latina están en segunda generación, algunos en tercera, pero que lo que realmente se quiere es llegar a tener en la región puertos de cuarta generación, como los terminales de Hamburgo y de Rotterdam, en los que la tecnología es fundamental, y que todos los actores vinculados a la cadena logística están interconectados.
Pero acotó que no es suficiente que una inversión la haga una autoridad marítima o un puerto, por lo que la deben hacer todos los actores que forman parte de esta cadena de valor.
Eddie Tapiero, economista e investigador de la Autoridad del Canal de Panamá, coincidió por su parte en la relevancia de hacer un cambio de paradigma, para tener disposición de colaborar e impulsar el sector.