El anuncio se produjo en medio de reuniones del nuevo presidente Alejandro Giammattei, con funcionarios estadounidenses esta semana para discutir cómo atraer inversiones para fortalecer el crecimiento económico y contener la migración a Estados Unidos.
Ciudad de Guatemala. Estados Unidos inyectará US$1.000 millones al sector privado de Guatemala para estimular la inversión y crear empleos, dijo este miércoles el jefe de una agencia del gobierno de Estados Unidos.
El anuncio se produjo en medio de reuniones del nuevo presidente del país centroamericano, Alejandro Giammattei, con funcionarios estadounidenses esta semana para discutir cómo atraer inversiones para fortalecer el crecimiento económico y contener la migración a Estados Unidos.
"Son US$1.000 millones de financiamiento de nosotros, lo que debería catalizar alrededor de US$4.000 millones", dijo a Reuters Adam Boehler, director ejecutivo de la Corporación Financiera de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (DFC, por sus siglas en inglés) después de firmar un memorándum de entendimiento.
Boehler firmó el memorándum con el ministro de Economía de Guatemala, Antonio Malouf.
Al nombrar los US$4.000 millones, Boehler se refería a los efectos multiplicadores proyectados del financiamiento al sector privado.
El alcance potencial del acuerdo no se conocía previamente. El martes, la embajada de Estados Unidos en Guatemala dijo que las dos partes firmarán un memorándum de entendimiento para "estimular" US$1.000 millones de inversión del sector privado.
Actuando como un banco de desarrollo, la DFC se asocia con empresas del sector privado para financiar proyectos específicos. El gobierno guatemalteco no recibe el financiamiento. El desembolso del dinero dependerá de encontrar proyectos adecuados y económicamente viables.
A nivel mundial, el DFC invierte a través de financiamiento de deuda, seguro de riesgo político, financiamiento de capital y desarrollo técnico.
Giammattei, un conservador que heredó un polémico acuerdo migratorio de su predecesor, está bajo presión del presidente Donald Trump para detener el número de inmigrantes indocumentados desde Guatemala a Estados Unidos.
