"Estamos abriendo un mercado de 500 millones de consumidores, de alto valor agregado y de altos ingresos: ya no competimos tanto por precio sino por calidad", afirmó el ministro de Producción y Trabajo de Argentina, Dante Sica.

Buenos Aires. El ministro de Producción y Trabajo de Argentina, Dante Sica, destacó este lunes el "fuerte potencial" para las economías regionales del acuerdo celebrado recientemente entre el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión Europea (UE).

"Estamos abriendo un mercado de 500 millones de consumidores, de alto valor agregado y de altos ingresos: ya no competimos tanto por precio sino por calidad", afirmó el funcionario.

Sica pidió "tener en cuenta las necesidades y los requerimientos técnicos del mercado europeo, y trabajar fuerte sobre las mejoras de competitividad de la integración regional".

El funcionario realizó estas declaraciones durante un encuentro con cámaras sectoriales y empresarios de la provincia de Chaco (norte), con quienes dialogó sobre los desafíos y oportunidades del acuerdo entre el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y la UE para la región.

"El acuerdo tiene un potencial muy fuerte, en especial para las economías regionales", destacó Sica en diálogo con los principales referentes de la actividad económica de Chaco.

El titular de la cartera productiva remarcó que "es un acuerdo que tendrá mucho impacto a nivel de las regiones, porque hemos contemplado aquellos productos que tienen mucho más impacto a nivel de las provincias, como es la fruta, el olivo, el vino, el algodón, el sector textil. Vemos que hay impacto positivo en todas las provincias con respecto a la recuperación de las exportaciones", añadió.

El acuerdo alcanzado a finales de junio entre los dos bloques implica un mercado de casi una cuarta parte del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, con más de US$100.000 millones de comercio de bienes y servicios, según la Cancillería argentina.

Incluye además la eliminación de aranceles para el 93% de las exportaciones del Mercosur a la UE y un trato preferencial para el 7% restante.

Respecto a bienes industriales, el bloque europeo liberalizará casi la totalidad de su comercio, mientras que el Mercosur lo hará en un 80%.