El registro al octavo mes de 12,9%, es 5,3 puntos porcentuales más alto frente a igual periodo del año anterior, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). A julio, la desocupación fue de 13,1% mientras que en los tres meses a junio fue de 12,2%.

Santiago. El desempleo en Chile cayó levemente a un 12,9% en el trimestre a agosto respecto a los tres meses anteriores pero se mantuvo en los niveles más altos de una década, afectado por el impacto del coronavirus en la economía, informó el miércoles el gobierno.

El registro al octavo mes es 5,3 puntos porcentuales más alto frente a igual periodo del año anterior, precisó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). A julio, la desocupación fue de 13,1% mientras que en los tres meses a junio fue de 12,2%.

El país sudamericano registró los primeros casos de coronavirus en marzo y desde entonces aplicó una serie de medidas como toques de queda y cuarentenas para bloquear su expansión. El confinamiento ha empezado a suavizarse recientemente.

A fines de abril el INE reportó que el desempleo en el primer trimestre había llegado a 8,2%, su nivel más alto desde 2010, la serie vigente comparable, afectado por la irrupción de la pandemia sumada a los efectos en la economía de una ola de protestas sociales de fines del año pasado.

La cifra a agosto fue resultado "de las reducciones en 14,5% de la fuerza de trabajo y en 19,4% de los ocupados" en doce meses, precisó el INE. "Los desocupados aumentaron 46,0%, incididos únicamente por los cesantes (55,9%)", añadió.

La caída de los ocupados equivale a la pérdida de unos 1,7 millones de puestos de trabajo.

En una conferencia de prensa, la jefa del INE Sandra Quijada dijo que "la tasa de desocupación se mantiene dentro de los niveles más altos en toda la serie vigente de la encuesta. Sin embargo, en el último trimestre se observa una leve disminución, la cual se debe evaluar en los períodos siguientes si es un cambio de tendencia".

El INE destacó que, tal como en trimestres anteriores, aumentó la población fuera de la fuerza de trabajo influida principalmente por la fuerza de trabajo potencial, personas que debido a la emergencia sanitaria no estaban buscando un empleo pero sí estaban disponibles para trabajar.

Asimismo, la implementación en abril de una ley de protección al empleo que permite suspender funciones pero mantener el vínculo laboral explicó en gran parte que los ocupados ausentes -que representaron el 17,3% del total de ocupados- crecieron 120,1% o el equivalente a 680.382 personas en doce meses, dijo el INE.