El registro al séptimo mes del año está 0,9 puntos porcentuales por delante del trimestre a junio y 5,6 puntos respecto a igual periodo del año anterior, precisó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Santiago. El desempleo en Chile subió al 13,1% en el trimestre a julio y volvió a registrar su nivel más alto en una década impulsado por el impacto del coronavirus en la economía, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
El registro al séptimo mes del año está 0,9 puntos porcentuales por delante del trimestre a junio y 5,6 puntos respecto a igual periodo del año anterior, precisó el organismo.
"Los desocupados aumentaron 46,4%, incididos únicamente por los cesantes (58,6%)", dijo el INE en un reporte.
El organismo informó además que la fuerza de trabajo se redujo en 15,6% y los ocupados en un 20,6%. Según sexo, la tasa de desocupación de hombres (13,5%) fue mayor a la de mujeres (12,5%).
Tal como ha reportado el INE en meses previos, marcados por el impacto de la llegada del coronavirus a Chile en marzo, ha aumentado la cantidad de personas fuera de la fuerza de trabajo, que no están buscando empleo actualmente desalentados por las perspectivas del mercado en medio de las restricciones impuestas para frenar la pandemia.
"La población fuera de la fuerza de trabajo se expandió 31,8%, influida por personas que en su mayoría no estaban buscando un empleo, pero estaban disponibles para trabajar, conformando la denominada fuerza de trabajo potencial, y por los inactivos habituales", dijo el INE.
En tanto, el INE también reportó un aumento de los ocupados ausentes, que se explica por una ley de protección al empleo promovida por el Gobierno y que comenzó a regir en abril para que los trabajadores retengan sus puestos.
"Debido a la implementación de la Ley de Protección al Empleo, los ocupados ausentes, que representaron el 18,9% del total de ocupados, crecieron 132,6%, equivalente a 763.914 personas", señaló el reporte.
Por sectores, la reducción de los ocupados tuvo mayor incidencias en comercio, construcción, alojamiento y servicio de comidas.
El país sudamericano aplicó desde mediados de marzo una serie de restricciones como cierre de fronteras, cuarentenas, suspensión de clases y cese del comercio, entre otras, que han afectado duramente a la economía.