El brote del virus 2019-nCoV, ha golpeado al turismo y el consumo de China en su mejor momento del año y tiene el potencial de afectar el comercio exterior y la demanda por materias primas del gigante asiático, el mayor socio comercial de América Latina.
Santiago. Si China estornuda, América Latina se resfría. El nuevo coronavirus aún no ha contagiado a nadie en la región, pero unos mercados cambiarios que partieron el año con mal pie ya lo están sufriendo, en economías cuyas previsiones de crecimiento habían bajado aún antes de que la Organización Mundial de la Salud decretara emergencia para la segunda economía del mundo.
El brote del virus 2019-nCoV, que puede provocar neumonía, ha golpeado al turismo y el consumo de China en su mejor momento del año y tiene el potencial de afectar el comercio exterior y la demanda por materias primas del gigante asiático, el mayor socio comercial de América Latina y que ha crecido apenas a una tasa del 6%.
"El brote de coronavirus tiene el potencial de generar una mayor percepción de riesgo en los mercados financieros globales, provocando pérdidas en el mercado de capitales y cambios en las posiciones de inversión, que pueden llevar al peso mexicano a cotizar nuevamente por encima de los 19 pesos por dólar", dijo Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base.
Los inversores corrieron el viernes a refugiarse en el oro, el yen y el franco suizo, castigando a las materias primas y los activos de mercados emergentes, incluidas las principales monedas de la región, en momentos en que algunos analistas vuelven advertir de una "exuberancia irracional" en los mercados mundiales.
En México, los inversores estarán atentos a las cifras de crecimiento económico adelantadas que se conocerán el jueves y que podrían confirmar un estancamiento, y el mismo día mirarán de reojo los mismos datos para Estados Unidos.
La atención en Argentina, donde el peso oficial se mantiene controlado pero el implícito o contado con liquidación ha llegado a 84 unidades por dólar, estará puesta en las reuniones del ministro de Economía, Martín Guzmán, con analistas, inversores y empresarios en Nueva York, y su encuentro con el jefe de la misión para el país del Fondo Monetario Internacional (FMI), en momentos de incertidumbre en torno a cómo se pagará la deuda soberana.
En Chile, donde el peso ha venido perdiendo terreno desde que comenzó el año, los ojos estarán sobre el comité de política monetaria del Banco Central, que se reúne el miércoles. No se esperan cambios en la tasa de interés de referencia, pero sí señales de que podría pasar con una economía sumida en la incertidumbre por la inestabilidad política.
Las expectativas para Colombia son las mismas, sin cambios en la tasa de interés, pero con un banco central más cómodo con una inflación que aún está dentro de sus objetivos.
En Brasil, el escenario económico es más optimista, pero la moneda se ha debilitado en línea con la baja de otras divisas de mercados emergentes.
"La debilidad del real este mes en parte recorta las ganancias de diciembre y del año (pasado), es poco probable que veamos que la moneda fluctúe por debajo de 4 (por dólar) o por encima de 4,40", dijo Felipe Pellegrino, gerente de Tesorería de Travelex Bank.
En Perú, los resultados de unas peculiares elecciones legislativas marcarán la pauta de los mercados, que están ansiosos porque se encuentre una salida a la crisis política abierta por los enfrentamientos entre el Congreso y el poder ejecutivo.
El coronavirus, que ya ha dejado al menos 81 muertos en China y con casos en Estados Unidos y Europa, tiene el potencial de complicar a economías que se están recuperando y con previsiones menos auspiciosas que hace sólo unos meses.