Directora ejecutiva de la entidad, Christine Lagarde, confirmó este sábado que el mundo saldrá "a distintos ritmos" de las crisis, pero advirtió de la aparición de nuevos riesgos económicos como la deflación.

Davos. En una conferencia sobre pronósticos económicos para 2014, celebrada este sábado en la jornada de clausura del 44 Foro Económico Mundial, la directora ejecutiva del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, dijo que la deflación es un nuevo riesgo que podría afectar a las economías desarrolladas, en particular a la Unión Europea (UE).

"Existe el riesgo, la probabilidad de deflación", advirtió Lagarde sobre el fenómeno económico que consiste en una baja generalizada y prolongada del nivel de precios de bienes y servicios.

Dijo que en la Zona Euro la inflación está por debajo del objetivo, alertando sobre el promedio de inflación de los 18 países europeos que tienen al euro como moneda común, que ronda el 1%, por debajo del objetivo del Banco Central Europeo (BCE).

"Débiles tasas de inflación por mucho tiempo pueden llevar a ello. Es un riesgo potencial. El término deflación va acompañado siempre de ese débil nivel de inflación y un choque puede existir en esas economías" advirtió la directora francesa.

Mencionó también como riesgos las reformas de los mercados financieros "que no han terminado todavía y hay que acabarlas".

"El segundo riesgo son los desequilibrios en el crecimiento de las distintas zonas. Los desequilibrios mejoraron pero persisten todavía entre las distintas economías", comentó Largarde.

Por último, la directora consideró un "nuevo riesgo" económico el final de los estímulos monetarios en Estados Unidos que se producirán a principios de este año.

"Es un nuevo riesgo y hay que vigilarlo", subrayó Lagarde.

La directora del FMI señaló además que "hay que poner a cero las políticas monetarias, que deben durar hasta que el crecimiento esté bien anclado en esas economías lo que todavía no ha llegado. Luego deberán reformularse".

La responsable del FMI insistió en que la economía mundial "está en una fase de consolidación que va a diferentes ritmos en cada región".

"En las economías desarrolladas va más rápido, en las emergentes la cadencia se ralentizó, pero sin embargo hay mucho optimismo", precisó.

Por último, Lagarde llamó a continuar realizando reformas estructurales no sólo en los países con sistemas económicos con rigideces.

"Se siguen necesitando reformas estructurales en todo el mundo, no sólo en los mercados rígidos y economías avanzadas, sino que se necesitan reformas estructurales en distintos tipos de economías", concluyó.

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