Los datos negativos apuntan a más problemas para el vasto sector manufacturero del país que ya está luchando con una disminución en los pedidos, despidos y cierres de fábricas, ya que el crecimiento económico de China se desaceleró a su nivel más débil en casi tres décadas.
Pekín. Las ganancias de las empresas industriales de China se contrajeron por segundo mes consecutivo en diciembre, presionando a los responsables políticos para que apoyen a las industrias afectadas por la desaceleración de los precios y la débil actividad de las fábricas en medio de una prolongada guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Los datos negativos apuntan a más problemas para el vasto sector manufacturero del país que ya está luchando con una disminución en los pedidos, despidos y cierres de fábricas, ya que el crecimiento económico de China se desaceleró a su nivel más débil en casi tres décadas.
La economía de China se expandió un 6,6% en 2018 y el crecimiento se desacelerará aún más este año, ya que los esfuerzos de Beijing para reducir los riesgos de la deuda deprimen el mercado inmobiliario y frenan los flujos de crédito al sector privado, mientras que la represión de la contaminación induce la actividad industrial.
Las ganancias industriales en diciembre cayeron un 1,9% respecto al año anterior a 680,8 mil millones de yuanes (US$100.9000 millones), agobiadas por los débiles precios de la puerta de la fábrica y la suave demanda, dijo el lunes la Oficina Nacional de Estadísticas (NBS). Esto se suma a una caída del 1,8% en noviembre, la primera contracción de las ganancias en casi tres años.
"En lo que respecta a la tendencia futura, es bastante obvio que continuará disminuyendo porque el (índice de precios al productor) aparentemente se volvió negativo el mes pasado, y cuando el IPP se volvió negativo, los beneficios de las empresas industriales disminuirán, ”Dijo Tang Jianwei, economista de Bank of Communications en Shanghai, y agregó que la estructura de la rentabilidad corporativa también comenzará a cambiar.
"Las ganancias en los sectores intermedios y descendentes pueden estabilizarse, mientras que el sector ascendente enfrentará una presión inmensa".
Las ganancias en los sectores de la química, la minería del carbón y los metales no ferrosos disminuyeron significativamente en diciembre, según los datos.
Para todo el año, las ganancias aumentaron un 10,3% a 6,64 billones de yuanes (US$983.000 millones) en 2018, aliviando el robusto ritmo de 2017 del 21%.
Los sectores río arriba, como la extracción de petróleo, la minería del carbón y del metal, todavía tenían el mayor número de ganancias en ganancias el año pasado, pero los analistas dicen que a medida que los precios industriales se desaceleran aún más o incluso se reducen, la rentabilidad se verá presionada.
Tang dijo que si los recortes de impuestos a gran escala prometidos por el gobierno podrían implementarse a tiempo, sin embargo, ayudaría a poner un piso en la disminución de las ganancias industriales en la segunda mitad.
Una encuesta realizada por el planificador estatal este mes mostró que la actividad en 2.500 pequeñas y medianas empresas chinas continuó contratándose en el cuarto trimestre del año pasado a pesar de una serie de políticas gubernamentales de apoyo.
El índice de desarrollo de las pequeñas y medianas empresas se ubicó en 93 el último trimestre, por debajo de la marca de 100 que separa el crecimiento de la contracción, según la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.
Moody's dijo en un informe reciente que las últimas medidas del gobierno chino para respaldar la financiación de firmas privadas tendrían un efecto limitado, ya que el crédito se canalizaría principalmente hacia las empresas privadas más sólidas y menos fuertes.
Los datos de este lunes mostraron que los pasivos de las empresas industriales aumentaron un 5,2% respecto al año anterior a 64,1 billones de yuanes (US$9,576 billones) para fines de 2018, en comparación con un aumento del 5,8% a fines de noviembre.
La demanda permanece suave. Aunque los comerciantes están llenando el inventario antes de las vacaciones del Año Nuevo Lunar a principios de febrero, la demanda sigue siendo débil.
Agravando la desaceleración, el gobierno también ha prometido que no renunciará a hacer cumplir los controles contra la contaminación, negándose a aceptar la creciente presión económica como excusa.
Eso aumenta la incertidumbre sobre el impulso general al sector industrial de las medidas de apoyo que los formuladores de políticas han prometido hasta ahora.
Beijing ha prometido aumentar el gasto en proyectos de infraestructura este año e impulsar el consumo en áreas como automóviles y electrodomésticos.
La empresa estatal China Railway está planeando una inversión ferroviaria récord por un valor de unos 850 mil millones de yuanes (US$127 billones) en 2019, según un informe de Nikkei.
Los precios al productor de China aumentaron a su ritmo más lento en más de dos años en diciembre. Los nuevos pedidos, un indicador de actividad futura, se contrataron por primera vez en al menos un año en diciembre.
Las ganancias en las empresas industriales estatales de China aumentaron un 12,6% en 2018 respecto al año anterior, desacelerándose de un aumento del 16,1% en el período enero-noviembre.
