La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador espera que la estancada economía crezca entre 1,5%-2,5% en el 2020, frente al rango de 0,6%-1,2% este año, y lograr un superávit primario a un 0,7% del Producto Interno Bruto (PIB), menor a la de 2019.
Ciudad de México. El gobierno de México presentó este domingo su presupuesto de 2020 con el que dijo busca atender los apremiantes problemas de seguridad y violencia, enfatizar el gasto social y respaldar a la petrolera insigne Pemex, mientras promete mantener la disciplina fiscal.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador espera, en tanto, que la estancada economía crezca entre 1,5%-2,5% en el 2020, frente al rango de 0,6%-1,2% este año, y lograr un superávit primario a un 0,7% del Producto Interno Bruto (PIB), aunque menor al del 1,0% para 2019.
El mandatario ha dicho que la segunda mayor economía de Latinoamérica crecerá un 2% este año pese a que organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) dicen que será menor y varias agencias calificadoras de riesgo han puesto bajo la lupa las notas soberanas y de la endeudada estatal Pemex.
El secretario de Hacienda, Arturo Herrera, dijo que el proyecto de presupuesto -que contempla ingresos totales del sector público por el equivalente a unos US$312.000 millones- dará prioridad a atender el gasto social, a atacar la inseguridad y apuntalar las finanzas de la petrolera, así como su producción de hidrocarburos.
El funcionario agregó que el gobierno estima inyectar el equivalente a unos US$2.350 millones a la empresa, lo cuales están incluidos en "apoyos" totales para Pemex por unos US$4.400 millones, contemplados en el presupuesto, el cual debe ser aprobado por el Congreso.
El gobierno contempla un precio para la mezcla mexicana petrolera de exportación de US$49 por barril, por debajo de los US$55 del 2019, así como una plataforma de producción de crudo de 1,95 millones de barriles por día (bpd), frente a los 1,7 millones de bpd actuales, y exportaciones de 1,134 millones de bpd.
Riesgo y coberturas. La baja para la estimación del precio de la mezcla obedece a una menor demanda, por la escalada de las tensiones comerciales, la desaceleración de la actividad industrial global y la entrada en vigor en 2020 de la regulación de la Organización Marítima Internacional (OMI) sobre el contenido máximo de azufre del combustóleo, explicó Hacienda.
El plan presupuestario del gobierno dijo que "continuará implementando acciones" para proteger las finanzas públicas con las coberturas petroleras, tanto a nivel federal como de Pemex; con la línea de crédito flexible con el FMI y amortiguadores como el fondo petrolero de estabilización, que suelen usarse para pagar las coberturas.
El proyecto prevé un tipo de cambio promedio de 20 pesos por dólar para 2020 y una inflación a tasa anual de 3% para el cierre del próximo año.
Hacienda dijo que las variables macroeconómicas podrían verse afectadas si llegaran a exacerbarse algunos riesgos locales y externos, como un mayor retraso en la aprobación del renegociado acuerdo comercial de Norteamérica T-MEC.
También citó un agravamiento de los conflictos geopolíticos y comerciales internacionales; una mayor desaceleración de la economía global y un mayor deterioro en la calificación crediticia de Pemex, con su posible contagio a la deuda soberana.
Para James Salazar, analista de CI Banco, es una "buena noticia que se mantenga el superávit primario y que sea menor al 1% para tener mayor margen de actuación".