El mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, explicó que en una conversación el fin de semana con Larry Fink ambos discutieron sobre cómo actuar frente a la expansión del virus y la crisis económica y financiera.
Ciudad de México. El mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, abogó ante el presidente de Blackrock, el mayor administrador de activos del planeta, por la aplicación de una especie de "Plan Marshall" para los países más golpeados por el brote de coronavirus, dijo este lunes al detallar su plan de reactivación económica.
López Obrador, conocido por su acrónimo AMLO, explicó que en una conversación el fin de semana con Larry Fink ambos discutieron sobre cómo actuar frente a la expansión del virus y la crisis económica y financiera.
"Se requiere un especie de Plan Marshall. Se lo planteé", dijo AMLO, que expresó a Fink su descontento porque "la ONU no está interviniendo más" para asegurar un reparto equitativo de medicinas y equipos médicos, y por la supuesta falta de responsabilidad de los actores de la economía global.
El llamado "Plan Marshall" fue una iniciativa de Estados Unidos para ayudar a Europa Occidental a recuperarse de los estragos dejados tras la Segunda Guerra Mundial.
AMLO se quejó del desacuerdo entre Rusia y Arabia Saudita en materia de producción de petróleo, que ha generado un desplome del precio del crudo especialmente doloroso para países productores como México. "No puede ser que se actúe de esta manera", dijo.
La secretaria de Energía mexicana, Rocío Nahle, aseguró el viernes a Reuters que México no planea aplicar recortes a su producción de crudo, ni siquiera en los campos más costosos de producir, pese a la contracción de la demanda petrolera mundial y la caída de los precios.
Desde el sector privado cuestionan que el plan no incluye apoyos financieros para los empresarios, a los que además exige apretarse el cinturón y mantener a sus trabajadores en nómina, pese a que en el país se suspendieron hasta el 30 de abril las actividades económicas no esenciales.
AMLO descarta retrasar o condonar el pago de impuestos para las empresas. En cambio, prometió que México crearía dos millones de empleos en los próximos nueve meses y aumentaría los préstamos para las pequeñas empresas, además de endurecer la austeridad del sector público.
"Yo quisiera que se lo preguntaran al gobierno: ¿cómo va a crear dos millones de empleos en nueve meses con estas condiciones que estamos viviendo? ¿Y cuánto costará?", dijo el presidente de la máxima cúpula empresarial, CCE, Carlos Salazar.