La atención girará también sobre la decisión de la Reserva Federal en su reunión de política monetaria de este miércoles, un día en que los mercados de la región permanecerán cerrados por la celebración del día del Trabajador.
Santiago. Las monedas de América Latina podrían seguir aprovechando la debilidad del dólar en la semana, después de que el billete verde se tomó un respiro de su racha alcista debido a flojos datos de inflación en Estados Unidos y en momentos en que los inversores cuadran posiciones por cierre de mes.
La mayor economía del mundo se expandió un 3,2% a tasa anualizada en el primer trimestre, un dato alentador pero que fue eclipsado por un tibio avance del índice de precios de consumo de los gastos personales, la medida preferida de la Reserva Federal sobre inflación, que se incrementó sólo un 1,3% frente a un 1,8% en el trimestre previo.
El dólar retrocedió este viernes, cortando una racha de tres sesiones seguidas de avances, aunque su medición ante una canasta de seis importantes divisas avanzó un 0,7% la semana pasada.
El peso mexicano, que subió este viernes tras los datos estadounidenses, podría continuar con su avance en la semana, aunque por delante tiene un nivel de resistencia técnica muy fuerte alrededor de las 18,75 unidades por dólar, dijo un operador de cambios en la ciudad de Guadalajara.
"Va a ser un poco complicado que lo rompa, es una resistencia fuerte", agregó el operador, apuntando además que el mercado estará pendiente a las cifras preliminares del PIB mexicano del primer trimestre. "La moneda podría oscilar entre 18,80 pesos y 19,10 pesos por dólar".
La atención girará también sobre la decisión de la Reserva Federal en su reunión de política monetaria de este miércoles, un día en que los mercados de la región permanecerán cerrados por la celebración del día del Trabajador.
Los analistas no esperan que la Fed aplique cambios a sus tasas de interés. De hecho, un reciente sondeo Reuters pronosticó que el banco central ya no subiría más el costo del crédito e incluso la recortaría en 2020.
Mientras, en Argentina, el peso se mantendría inestable en un contexto cauteloso de cara las próximas elecciones presidenciales en medio de un marco recesivo y de alta inflación, luego de que la moneda tocara este jueves un nivel piso histórico de 46,55 unidades por dólar.
"El problema mayor (del peso) es la gran volatilidad que tiene y que genera mucha incertidumbre", dijo Esteban Goyheneix de la sociedad de bolsa Neix.
El peso chileno podría mejorar su desempeño en comparación a la semana pasada, siempre dependiendo también de que la debilidad del dólar respalde los precios del cobre, la principal exportación del país.
"El peso ha estado muy presionado en los últimos días y tuvo una depreciación importante la semana pasada, pero lo más probable es que en los próximos días se recupere en parte de esas pérdidas, dependiendo del comportamiento del precio del cobre y lo que ocurra con el dólar a nivel global", dijo un operador.
Los valores estimados para la moneda chilena, según el operador, serían de 668 pesos a 674 pesos por dólar.