El gobernador del Banco de México prevé un crecimiento económico de entre 2% y 3% para 2016
El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, aseguró que la previsión a la baja del Fondo Monetario Internacional (FMI) no altera el pronóstico de crecimiento del banco central, de 2% a 3% para este año, porque a pesar del clima internacional adverso, se vislumbra una recuperación del consumo interno, por los efectos positivos de diversas reformas estructurales.
Precisó a los legisladores que la entrega de remanentes a la Secretaría de Hacienda tendrá un impacto positivo para la reducción de la deuda de hasta 1% del PIB, lo cual enriquecerá el escenario previo de que en 2017 México tendrá por primera vez un superávit primario.
Dijo que desde 2003 hasta el lunes 11 de abril, el Banco de México entregó a la Secretaría de Hacienda 396 mil 400 millones de pesos; 239 mil millones se dieron el lunes 11 de abril y 157 mil millones se dieron a lo largo de 12 años.
Sin presiones. Durante su comparecencia anual ante la Comisión de Hacienda del Senado, Agustín Carstens explicó que la inestabilidad de la moneda nacional al arranque del año no tuvo efectos negativos para la mayoría de la población, pues no influyó en la inflación.
Detalló que se utilizó un total de 30 mil 277 millones de dólares para las subastas, pero aclaró que ya se está en el proceso de su recuperación.
“Las reservas internacionales se han estabilizado después de que hicimos un uso más o menos intenso el año pasado, ya expliqué las razones por lo cual lo hicimos y por qué paramos, las reservas se han vuelto a ir recuperando gradualmente y ahora estamos a un nivel de alrededor de 178 mil millones de pesos; que junto con la línea de crédito flexible del FMI, nos da recursos cercanos a 250 mil millones de dólares, lo cual es muy valioso para darle estabilidad a la moneda nacional”, precisó.
Destacó que existe una dinámica positiva en el consumo interno, dado la existencia de más plazas laborales estables y la existencia de créditos bancarios más sanos y a bajas tasas.
“Realmente el consumo viene muy bien, tanto por las cifras del Inegi, que es este Índice del Consumo Privado, que es bastante oportuno, como las cifras que reporta la ANTAD. Esto ha sido resultado de que se ha venido creando más empleo. Hay más empleo formal, eso les ha dado más acceso al crédito a las familias.
“Por otro lado, la masa salarial real ha crecido y también las remesa. Entonces hay varios factores que explican este dinamismo en el consumo privado que está creciendo cerca de cuatro por ciento en los últimos trimestres”, aseguró.
Carstens añadió que existe un crecimiento en el empleo formal, “de hecho ha venido creciendo más de lo que se reporta en la ENOE, del Inegi, que es la población ocupada, lo cual quiere decir que cierta gente que estaba ocupada simplemente sigue, pero ahora en el sector formal. Por eso han venido creciendo más los afiliados en el IMSS”.
Destacó que la banca está sana y estable, con un capital bastante superior al mínimo requerido, como efecto de la Reforma Financiera.
Confiscar remesas, ilegal. La amenaza de Donald Trump de frenar las remesas de los mexicanos es completamente ilegal, porque viola el derecho de propiedad, aseguró el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, quien recordó que el dinero es propiedad de quien lo gana y nadie puede impedir que lo transfiera donde desee.
En conferencia de prensa, después de su comparecencia ante el Senado, expresó que “las remesas son propiedad de las personas que las ganaron y ellas tienen todo el derecho de poderlas transmitir internacionalmente, entonces sí sería una violación a los derechos de propiedad de nuestros connacionales en el extranjero”, dijo.
Agregó que desde hace varias semanas, Hacienda está en conversaciones con las autoridades de EU para garantizar que algunas transferencias no sean consideradas actividades de lavado de dinero y se les reconozca como remesas.
“Con respecto a las remesas de EE.UU., sin duda es un tema muy importante. Creo que se ha avanzado mucho en bajar los costos y en la metodología.