Este viernes entrará en vigencia el nuevo Tratado de Libre Comercio. El país asiático importa cada año US$27.000 millones en alimentos, por lo que los productos agrícolas colombianos podrían robarse una tajada de ese pastel.
Ya no hay vuelta atrás: este viernes entrará en vigencia el tratado de libre comercio (TLC) entre Colombia y Corea del Sur. El acuerdo comercial tuvo que superar acalorados debates en el Congreso de la República y opiniones divididas en la Corte Constitucional y debió enfrentar las fuertes críticas de algunos sectores industriales, como los ensambladores de autos, que ven su negocio amenazado por la fuerte industria automotriz coreana. Sin embargo, los retos fueron superados y desde este 15 de julio el país asiático será el nuevo aliado en materia de comercio exterior colombiano. La pregunta que queda es: ¿qué se ganará con este pacto?
Para la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Claudia Lacouture, “el acuerdo comercial con Corea es una oportunidad para aprovechar las fortalezas que tenemos en agroindustria, dada la vocación importadora de ese país, pues tan sólo el 30% de su territorio es cultivable. En el nuevo escenario que se nos abre por las ventajas comerciales que tendremos al amparo del acuerdo, nuestras frutas y hortalizas gozarán de esos beneficios. Este acuerdo es una plataforma para llegar a un consumidor asiático que tiene amplias preferencias por las frutas exóticas, las flores y el café. Para aprovecharlo debemos fortalecer la competitividad con ayuda de las herramientas que este ministerio tiene para los empresarios”.
De acuerdo con Javier Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), “el éxito de cualquier TLC depende de nosotros. Son sólo herramientas y nosotros vemos cómo las aprovechamos. Sin embargo, es claro que el tratado con Corea del Sur puede ser la oportunidad de Colombia de penetrar el mercado asiático, el cual por el momento es muy poco trabajado. En cuanto a importaciones, nos podríamos beneficiar en todo el tema automóviles y de electrodomésticos, en el área de línea blanca. Además, esta puede ser la oportunidad para que los productos agropecuarios exploten un territorio con alta demanda. En especial, hay potencial para frutas como el mango, la papaya y el banano”.
El mercado agrícola que se podría explotar no es nada despreciable. Corea del Sur importa cada año US$27.000 millones y Colombia podría robarse una tajada de ese pastel. De acuerdo con el Ministerio de Comercio, hay 500 productos agropecuarios de todos los departamentos del país con potencial en Asia. Y de ese total hay una nómina de 321 que el país ya exporta, pero que aún no han conquistado Corea.
“En materia automotriz, el consumidor nacional se verá beneficiado con una mayor oferta. Durante el primer semestre de 2016 los carros provenientes de Corea del Sur tuvieron una participación de 14,7 % del mercado local, sólo superado por México (19,4 %) y los carros ensamblados en Colombia (37,3 %). Si bien no se espera una reducción de precios de los automóviles de este país asiático en el corto plazo, sí se espera que estos productos aumenten su presencia. Por su parte, los productores locales deberán adaptarse a la nueva realidad del comercio exterior colombiano, una política arancelaria que se irá desmontando de a poco, pero que abre la puerta a un poderoso jugador automotor internacional”, afirmó Oliverio Enrique García, presidente de la Asociación Colombiana de Vehículos Automotores (Andemos).
A pesar del nuevo flujo comercial que sería posible con la entrada en vigencia del TLC, la producción automotriz colombiana ha ganado relevancia en el último año: las cifras de Andemos muestran que, mientras en el primer semestre de 2015 los autos fabricados en el país representaban el 32% del mercado local, en los primeros seis meses de 2016 su participación subió hasta 37,9 %. Por su parte, los carros de Corea del Sur bajaron su peso de 16,6% a 14,7% en el mismo período. Sin embargo, no se puede desconocer que debido al dólar, el encarecimiento de los créditos y la actividad económica, el registro de matrículas de nuevos vehículos ha caído 8% entre enero y junio de 2016, según la Federación Colombiana de Comerciantes (Fenalco).
Si bien este viernes entrará en vigencia el TLC con Corea del Sur, el proceso para que se materialice la totalidad del tratado llevará tiempo: en materia industrial, el 96% de la oferta nacional exportable podrá ingresar de inmediato sin gravámenes; el restante 3% se dará en cinco años y el 1% que faltaría se cumpliría en 10 años. Para el caso agrícola, el 56% entrará con beneficios arancelarios desde la puesta en marcha del acuerdo. Luego, un 25% se desgravará en 10 años y el 19% restante en un plazo mayor a una década.