Si México crece en 1,8% este año, entonces la recaudación descendería en 330.000 millones de pesos (US$17.116 millones), estimó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
Ciudad de México.- Frente al posible menor crecimiento económico para este año, es probable que se presenten ajustes al presupuesto federal y ello complicaría el cumplimiento de los programas del presidente Andrés Manuel López Obrador y por ende, de la calificación del país, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
El CEESP especificó que el paquete económico 2019 se aprobó con base en una tasa puntual de crecimiento del PIB de 2,0%, lo que se estimó suficiente para lograr la recaudación prevista en el paquete económico.
“Se contempla una recaudación tributaria equivalente a 3 billones 311.000 millones de pesos (US$16.130 millones). Si el escenario de los especialistas se cumple, es decir que el crecimiento de la economía fuese de 1,8%, esa recaudación se reduciría en aproximadamente 330.000 millones de pesos (US$17.116 millones), incrementando los riesgos financieros del sector público, ya que en el supuesto de que el gasto no se reduce de manera proporcional, el déficit y la deuda tenderán a incrementarse”.
El CEESP explicó que si el escenario y los resultados continúan debilitándose, podrían aparecer serias complicaciones en temas como la salud de las finanzas públicas y con ello la posibilidad de ver modificaciones en la calificación soberana.
“La incertidumbre sigue presente entre los inversionistas, lo cual se hizo evidente en la encuesta que realizó el Bank of America Merrill Lynch, en la que se aprecia que 70% de los encuestados consideran que México podría perder su grado de inversión en el año 2020 o 2021”.
Si bien algunos expertos en el tema consideran poco probable que México caiga en esta situación, debido a que existe la capacidad para hacer frente a los compromisos contraídos sin problema alguno. Lo inquietante es la señal que se envía a los mercados y que puede afectar las decisiones de inversión en nuestro país, consideró el CEESP.
“Ahora el programa de ayuda a Pemex que le facilita 103,000 millones de pesos a través de diversas medidas, como la monetización del pagaré de su pasivo laboral y la reducción de su carga fiscal, además de una transferencia directa para inversión en la nueva refinería, lo que en conjunto equivale a 71,000 millones de pesos”, abundó el organismos aglutinado en el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Aunado a todo esto, existe la posibilidad de que un entorno de menor crecimiento también tenga incidencia en la salud de las finanzas públicas.
Sentenció: “Si se considera que la recaudación tributaria se apoya en el pronóstico de crecimiento es de esperar que, con un menor dinamismo, los ingresos por el cobro de impuestos también disminuirían”.