Desde el 1 de enero, los operadores del comercio exterior en el país altiplánico deben adaptarse a las nuevas disposiciones del Arancel Aduanero aprobado por el Ministerio de Economía.
Desde el miércoles 1 de enero de 2025, rige oficialmente el “Arancel Aduanero de Importaciones Bolivia 2025”, una resolución que ha sido aprobada por el Ministerio de Economía y que actualiza la normativa para la importación de productos al país.
De acuerdo con una nota de esa cartera de Estado, este cambio es parte del compromiso del Gobierno de Luis Arce por mejorar la competitividad y simplificar los procedimientos para los actores del comercio exterior.
La Resolución Ministerial 592, emitida el 17 de diciembre de 2024, establece las nuevas disposiciones del Arancel Aduanero, que incluye modificaciones en la nomenclatura nacional y está basado en el marco normativo vigente relacionado con aranceles y aduanas.
ARANCEL
Con esta normativa, se busca agilizar los trámites y proporcionar mayor transparencia a los procesos de importación.
Para facilitar el acceso a esta nueva regulación, el Ministerio de Economía de Bolivia ha puesto a disposición una versión impresa y digital del documento.
Los interesados, tales como importadores, exportadores y operadores comerciales, pueden adquirir el arancel en la biblioteca del Ministerio, ubicada en la calle Bolívar esquina Indaburo, en la ciudad de La Paz, por un costo de Bs 150 (US$ 21,09).
Además, la versión digital cuenta con un buscador que hará más fácil la consulta, y está equipada con un código QR que permitirá a los usuarios acceder a las actualizaciones periódicas del documento.
El Arancel Aduanero de Importaciones Bolivia 2025 busca no solo actualizar los códigos arancelarios, sino también ofrecer un documento más accesible y dinámico para los operadores del comercio exterior en el país andino.
Esta medida es parte de un esfuerzo continuo para mejorar las condiciones de importación y fortalecer el comercio internacional de Bolivia, tras los acuerdos entre el sector público con los empresarios privados, como una manera de lograr el ingreso de divisas al país.
