Juan Prada, estratega de Barclays, señaló al respecto que “mientras que las preocupaciones que había sobre Chile han estado moderándose, no es el caso para otras economías de la región como Perú con protestas constantes y Colombia con Petro”.
“Chile vuelve a parecer una buena casa en un mal barrio”. Con esa frase Bloomberg destacó que nuestro país comenzó a reposicionarse como el más seguro para invertir en la región.
En detalle, el riesgo país llegó a su menor nivel de los últimos ocho meses; y ese riesgo es menor a los que presenta Perú -afectado por una serie de protestas sociales y políticas-; y Panamá, por ejemplo, por conflictos ligados a la minería.
Conforme a la publicación, en el escenario favorable para la inversión influyó el rechazo a la nueva Constitución.
En el segundo semestre del año pasado, y en este contexto, Bloomberg había resaltado que “el favorito del mercado latinoamericano (Chile) ahora es más riesgoso que el caótico Perú”.
Aludió en ese momento a que Chile podía caer, con más posibilidad que el vecino país, en el impago de su deuda en los próximos cinco años.
Ahora, la publicación destacó que “desde mediados de diciembre, el diferencial de los los swaps de incumplimiento crediticio con sus pares regionales históricos se ha ido ampliando”.
Juan Prada, estratega de Barclays, señaló al respecto que “mientras que las preocupaciones que había sobre Chile han estado moderándose, no es el caso para otras economías de la región como Perú con protestas constantes y Colombia con Petro”.
En la disminución del riesgo país también incidió que tras una década el Gobierno logró por primera vez un superávit fiscal en 2022 de la mano de una mayor tributación y la minería.
Lo anterior quedó en evidencia luego que la Dirección de Presupuestos (Dipres) entregara detalles de la ejecución del Presupuesto Fiscal de 2022, con el mejor saldo en una década: el balance al cuarto trimestre 2022 fue un superávit del Gobierno Central Total de 1,1% del PIB, lo que corresponde a $2.959.383 millones.
Los ingresos totales del Gobierno Central acumulados a diciembre del año pasado alcanzaron los $68.133.281 millones, equivalente a un 25,5% del PIB estimado para el año, registrando una variación real anual de 6,3%.