De acuerdo con el banco suizo, este escenario estará marcado por la disipación de los efectos de la reapertura, los desafíos persistentes en el sector inmobiliario, y la prioridad gubernamental de contener riesgos en lugar de impulsar un crecimiento significativo.

De acuerdo con el reporte oficial del Producto Interno Bruto (PIB) publicado hoy miércoles, la economía china cerró 2023 con un crecimiento del 5,2%, cumpliendo con la meta gubernamental de alrededor del 5%. De acuerdo con el banco suizo Julius Baer, aunque esta cifra refleja solidez, se observó una desaceleración en el impulso de crecimiento durante el último trimestre de 2023, en consonancia con las expectativas.

Asimismo, se proyecta una disminución en la tasa de crecimiento anual al 4,4% en 2024, atribuible al debilitamiento de los efectos de la reapertura, la persistente complejidad del sector inmobiliario, y la orientación gubernamental centrada en contener riesgos en lugar de inyectar un impulso sustancial al crecimiento.

Y es que a pesar de alcanzar la meta del gobierno para el crecimiento, el año 2023 presentó desafíos no anticipados. La recesión en el sector inmobiliario continuó siendo un obstáculo considerable, y la breve recuperación no logró revitalizar la confianza, dado que la demanda general se mantuvo en niveles moderados. 

Los datos de la actividad económica en diciembre evidenciaron que si bien la producción industrial superó ligeramente las expectativas, las ventas minoristas disminuyeron más de lo previsto. Sin embaro, la inversión en activos fijos se fortaleció, impulsada por una mayor inversión en infraestructura y manufactura, gracias al apoyo adicional de la política fiscal para proyectos de infraestructura. 

La proyección para el impulso de crecimiento económico de China apunta a una estabilización en niveles moderados durante este año, con una desaceleración anual estimada del 4,4%. Este escenario estará marcado por la disipación de los efectos de la reapertura, los desafíos persistentes en el sector inmobiliario, y la prioridad gubernamental de contener riesgos en lugar de impulsar un crecimiento significativo.