Las remesas -que registraron un aumento anual de 6,3%- fueron emitidas en dólares, pero se recibieron y gastaron en México en pesos, superando así al registro histórico de 2022 cuando entraron US$ 4.707 millones.
En abril, ingresaron al país US$ 5.003 millones en remesas; una entrada que significó un incremento anual de 6,3%, informó este jueves el Banco de México (Banxico).
Este flujo mensual resultó inferior a los US$ 5.186 millones que captaron los hogares receptores el mes de marzo, pero se queda como el segundo más alto en lo que va del año.
Aún con esta desaceleración, las transferencias recibidas en abril son las más altas captadas para un mes similar desde 1995 y superan al registro histórico de 2022, cuando entraron US$ 4.707 millones.
Cada uno de los 4,9 millones de hogares receptores de remesas recibieron un giro promedio de US$ 382, que también muestra una desaceleración desde los 394 que como media captaron en marzo.
En el periodo de enero a abril, las remesas acumuladas ascienden a US$ 18.974 millones, una cifra superior a los US$ 17.230 millones observados en el mismo periodo del año anterior.
Tal como lo ha explicado el economista para América Latina de Goldman Sachs, Alberto Ramos, las remesas son emitidas en dólares, pero se reciben y gastan en México en pesos. De manera que la apreciación cambiaria así como la inflación, terminan por presionar el poder de compra de estos giros.