"El Foro de Davos era una gran oportunidad para meterle velocidad al emplazamiento de las cadenas de valor en todo el territorio nacional. Somos el país con más acuerdos comerciales firmados a nivel mundial porque los países quieren comerciar con nosotros y ahora con el fenómeno del nearshoring podríamos atraer inversiones que nos pongan mucho más allá del papel obreros de bajo salario", señaló un académico.
El nearshoring es una oportunidad histórica que se da en la vida de un país cada 50 años, explicó el embajador Miguel Ruiz Cabañas, catedrático de tiempo completo en el del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de México (ITESM).
Es un cambio en el sistema internacional que nos beneficia enormemente si aprovechamos la oportunidad, subrayó.
Y es en este contexto que México se ausentó de Davos por segundo año consecutivo. Ningún representante del gobierno federal acudió al Foro que suele ser el escaparate para atraer inversiones y cerrar grandes negocios.
México se encuentra en el foco de los empresarios que están acercándose a Estados Unidos para reubicar sus cadenas de suministro y está también en la mira del capital privado que busca un alto retorno de inversión, coincidió con el profesor e investigador de la Escuela de Negocios de la Universidad Panamericana, Gabriel Pérez del Peral.
Pero también es importante buscar más inversionistas de otras latitudes. Aprovechar los más de 1,000 acuerdos comerciales que tenemos firmados y abrir las oportunidades para todos los estados del país, señaló Gabriel Pérez del Peral. Y eso representaba la ocasión de participar en el Foro de Davos
"El Foro de Davos era una gran oportunidad para meterle velocidad al emplazamiento de las cadenas de valor en todo el territorio nacional. Somos el país con más acuerdos comerciales firmados a nivel mundial porque los países quieren comerciar con nosotros y ahora con el fenómeno del nearshoring podríamos atraer inversiones que nos pongan mucho más allá del papel obreros de bajo salario", señaló un académico.
El experto del ITESM matizó que producto de la visita que hicieron a México este mismo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, está el acuerdo firmado de acelerar la integración para sustituir 25% de las importaciones de Asia. Y la inversión de empresas comenzó a llegar sola incluso antes de esta visita.
El Foro de Davos es anual y el nearshoring seguirá fluyendo por muchos años más. Quizá más adelante encuentren el atractivo para aprovecharlo, coincidieron.
América Latina dentro
Si bien México no estuvo presente en el Foro, sí fue tomado en cuenta por los inversionistas. El CEO de BlackRock, el mayor fondo de inversión del mundo Larry Fink advirtió en una de las 369 conversaciones que México estaba en la posición única para facilitar la reubicación de empresas y cadenas de suministro hacia Estados Unidos.
Ofrece la oportunidad de otorgar mayor retorno al capital privado, salarios más bajos que en China y proximidad geográfica favorable para el transporte. Comerciar con los socios más cercanos es un retorno seguro y ahí es donde México ha logrado insertarse, señaló.
Pese a la fortuita oportunidad, ni una sesión de América Latina tocó el tema de México. Ni cuando participó el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, ni en el discurso del nuevo secretario de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), José Manuel Salazar Xirinachs. Hay una lista de cosas que tienen que estar bien para lograr un crecimiento elevado: clima de inversión, infraestructuras, educación, equilibrios macroeconómicos, buena gobernanza y una política industrial basada en la instalación de clústeres.
América Latina estuvo representada en el Foro de Davos por los presidentes de Ecuador, Colombia, Costa Rica, República Dominicana y representantes ministeriales de Brasil y Perú.
De parte de México acudieron el gobernador de Nuevo León, Samuel García y el rector y presidente del ITESM, David Garza.
Relevancia del Foro de Davos
El Foro de Davos en su versión 2023, contó con la mayor asistencia en su historia, de más de 2,659 participantes oficiales, decenas de jefes de estado y ministros, líderes empresariales de diversas ramas tecnológicas, financieras, científicas y médicas. También se contó como 30,000 visitantes no acreditados que llegaron a promover a sus países y empresas para cerrar negocios.
En el Foro se concibió el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, recordó Pérez del Peral, cuando el entonces presidente de México, Carlos Salinas de Gortari instruyó a su secretario Jaime Serra de buscar a los representantes de comercio de Canadá y Estados Unidos para negociar una posible alianza comercial.
En 1988, el Foro de Davos fue el espacio neutral que permitió una conversación entre el primer ministro de Turquía y el de Grecia para evitar una guerra entra ambos países.
En la reunión de 1990, bajo el lema “la nueva Europa” se reunieron por primera vez los líderes de los países de Europa Occidental y Oriental.
En 1992, Nelson Mandela eligió Davos para hacer su primer discurso sobre el futuro económico de Sudáfrica bajo el Consejo Nacional de Sudáfrica, lo que marcó el fin del Apartheid. En 2017 el presidente chino Xi Jinping se convierte en el primer mandatario de aquella latitud que asiste a las reuniones del Foro de Davos, dando el mensaje de apertura al mundo.
En el Foro del 98 los participantes enfatizaron la necesidad de incluir a los principales países en desarrollo en la reforma del sistema financiero mundial tras la crisis financiera, era el nacimiento del G20.