El Departamento de Comercio estadounidense ha informado de que la lectura preliminar recoge aumentos en el consumo de las familias, las exportaciones y el gasto público a nivel federal.
El producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos experimentó un incremento del 0,7% en el tercer trimestre, sin cambios desde el periodo anterior, según se desprende de la primera estimación publicada este miércoles por la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio.
Este departamento ha informado de que la lectura preliminar recoge aumentos en el consumo de las familias, las exportaciones y el gasto público a nivel federal. De su lado, las importaciones avanzaron y detrajeron del PIB.
En cifras anualizadas, el PIB estadounidense entre julio y septiembre se elevó un 2,8%, frente al 3% de los tres meses previos, una leve ralentización antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
En comparación con el segundo trimestre, la desaceleración se produjo por la caída de la inversión en inventarios y la profundización del retroceso de la inversión fija residencial.
Estos movimientos se vieron contrarrestados en parte por la mejora de las exportaciones, el consumo y el gasto federal. Las compras al extranjero repuntaron.