La falta de lluvias sigue impactando negativamente en el campo, además de la ganadería y agricultura a gran escala, sobre todo se ve perjudicada la producción de menor escala, como es el caso de la banana.
.Bananeros del municipio de Guayaybí, departamento de San Pedro, en Paraguya, alertaron que la prolongada sequía ya está generando escasez en este rubro, y esto ocurre principalmente entre los que no cuentan con sistema de regadío. Según el registro de los agricultores, hoy en la zona se mantienen unas 800 hectáreas de parcelas dedicadas a este sector, cuya producción ha mermado considerablemente por el factor climático.
Los productores señalaron que hace aproximadamente seis meses que no se registran suficientes lluvias en esta parte del departamento, es decir, en un volumen que permita la producción en la cantidad y calidad requeridas para satisfacer la demanda del mercado nacional.
Sobre el tema, el dirigente de la Asociación de Productores Bananeros de Guayaybí, Isidro Barrios, manifestó que hay una gran preocupación por la limitada producción de la banana en el distrito, pues el rubro es uno de los principales generadores de recursos de las familias de la zona.
Por otra parte, reconoció que el producto realmente no está teniendo la calidad de años anteriores, lo que también es consecuencia de la sequía, por lo que no es fácil su colocación en nuestro mercado y mucho menos en el extranjero. Los que sí consiguen calidad son quienes disponen de infraestructura en sus fincas, como el sistema de riego y otros accesorios complementarios, señaló.
El precio para el productor
En cuanto al precio pagado al productor, Barrios señaló que es “muy bueno”, aunque depende de la calidad de las frutas y del tamaño de las mismas.
Por ejemplo, la banana “de primera” se está comercializando hasta a G. 120.000 por cada caja en nuestro mercado, mientras que la de menor calidad se vende a G. 70.000 y 80.000.
Sin embargo, explicó que son pocos y hasta “privilegiados” los que logran acceder a los mejores precios. Eso, porque los agricultores que no pudieron optimizar su producción por la falta de equipamiento en sus parcelas se están conformando con recibir “cualquier precio” por sus frutas.
Precisamente, considerando este panorama, el presidente del gremio instó a los organismos del sector agrícola del Estado, especialmente al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y al Crédito Agrícola de Habilitación (CAH), a que brinden mayor acompañamiento, para que los bananeros de Guayaybí y localidades aledañas puedan seguir con la inversión en el sector.