Esto representa un incremento del 147% en relación con 2015, según proyecta un estudio que simuló la crisis aun mayor que se avecina por el abuso de analgésicos.

El análisis fue expuesto en la Revista Científica de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA) y utilizó datos de la Encuesta Nacional de Uso de Drogas y Salud (NSDUH), junto con estadísticas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). "Desarrollamos un modelo matemático, el 'Modelo de Políticas de Opioides', para simular la crisis de sobredosis en los Estados Unidos de 2002 a 2025", explicó Qiushi Chen, investigador del Departamento de Ingeniería Industrial y Manufactura de la Universidad Estatal de Pennsylvania y uno de los autores del informe.

El modelo fue comparado y calibrado con datos de muertes registradas por uso ilícito de opioides entre 2002 y 2015. Con base en esa calibración, el estudio proyectó el incremento de 147 % en las muertes en los próximos 10 años por esta causa.La investigación prevé que el número de personas que usan opioides en forma ilícita aumentará en 61 %, de 930.000 en 2015 a 1,5 millones en 2025. De esa manera, se calculó que, de continuar los modelos actuales de prevención y control de abuso de opioides recetados, las muertes por esta causa en el país aumentarán de 33.100 contabilizadas en 2015 a 81.700 para 2025.

En 2017 hubo 72.287 muertes por el abuso de drogas en Estados Unidos

"Los resultados del estudio sugieren que las acciones dirigidas contra el uso indebido de opioides de prescripción, como los programas de monitoreo de recetas, pueden tener un efecto modesto -en el mejor de los casos- sobre el número de muertes por sobredosis de opioides en un futuro próximo", afirmó el reporte. "Se necesitan urgentemente políticas adicionales de tratamiento y prevención para cambiar el curso de esta epidemia", anota en sus conclusiones.

Según datos publicados el año pasado por los CDC, en 2017 se registraron 72.287 muertes por el abuso de drogas. La entidad destacó que los casos por sobredosis de opiáceos de uso médico, como el fentanilo, provocaron más bajas que la heroína. La Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA) estima en cuatro millones el número de adictos a analgésicos -incluyendo los de prescripción médica-, casi 300.000 de los cuales son adolescentes. Cada día mueren 200 personas en Estados Unidos por sobredosis de opiáceos; una adicción que afecta a 4 millones en el país, donde las autoridades intentan poner freno a una sangría que tiene su origen en ocasiones en prescripciones médicas.