Se trata de una investigación elaborada por la Universidad de Toronto.
Pese a que a las mujeres se les conoce por ser capaces de conciliar la vida familiar y laboral, un nuevo estudio postula que esta actitud estaría escondiendo un sentimiento de culpabilidad.
Una reciente investigación desarrollada por la canadiense Universidad de Toronto, analizó una encuesta hecha a trabajadores, a nivel nacional, y notaron que las mujeres no se perdonan el continuar conectadas con la oficina, ya sea por medio de llamadas o correos electrónicos, estando en casa.
De esta forma, aquellas que seguían viendo asuntos laborales con supervisores, compañeros de trabajo o clientes, reportaron niveles de angustia psicológica. Al contrario de los hombres, quienes se vieron menos afectados.
En el sitio oficial de la casa de estudios, el co autor de la investigación, Scott Schieman, dice que los resultados sugiere que hombres y mujeres aún pueden mantener diferentes expectativas sobre los límites que separan la vida laboral y familiar, y estos pueden tener consecuencias emocionales.
El estudio está publicado en la Journal of Health and Social Behavior.