Hospital internó a la recién nacida, restringió el acceso de su progenitora a algunas horas al día e informó el hecho a tribunales. La mujer asegura no haber ocultado la información y dice que su consumo tenía fines terapéuticos.
Por La Nación. Una lactante de menos de una semana se encuentra separada de su madre luego de que la mujer admitiera, durante el trabajo de parto, que había consumido marihuana durante el embarazo.
El hecho ocurrió en el Hospital Las Higueras de Talcahuano, Región del Biobío (al sur del país), recinto en el que, como medida de protección, internaron a la lactante, separándola de su progenitora, le prohibieron a la mujer amamantar a su hija y restringieron el acceso de la madre a la menor apenas a tres períodos de dos horas y media al día.Como parte del mismo protocolo, calificado como habitual en estos casos, se informó también al tribunal.
La madre de la menor dice no haber ocultado la información cuando le consultaron, pues su consumo de marihuana había tenido fines terapéuticos debido a un problema en sus huesos.
Los padres de la niña denunciaron un trato discriminatorio y el aislamiento emocional de la niña, y presentaron un recurso judicial ante el Tribunal de Familia correspondiente.
En tanto, el caso trascendió más allá del ámbito familiar y regional, y organizaciones sociales han solidarizado con los padres y presentado recursos por vulneración de derechos, ante instancias de derechos humanos del Congreso, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), el Ministerio de Salud y el Ministerio del Interior.