Para la plataforma de alquiler de vivienda temporal, las regulaciones de estancias cortas excesivamente restrictivas pueden agravar los problemas de las ciudades.
Tras la aprobación por el pleno del Congreso de la Ciudad de México de la iniciativa que restringe al 50% de las noches del año para ofrecer alojamiento a turistas a través de plataformas de vivienda temporal, Airbnb calificó esta medida de "injustificada e anticompetitiva que terminará afectando a miles de familias y anfitriones que habitan en la capital del país".
"A través de esta actividad, muchos encuentran un medio para generar ingresos que al día de hoy fortalecen su economía familiar y la de su comunidad. 50% de los anfitriones en la Ciudad de México son mujeres y el 12% son mayores de 60 años. Además el 78% de los anfitriones ha indicado que ésta no es su actividad principal, es decir que la utilizan para reforzar otros ingresos. Aproximadamente el 80% de los anfitriones de la Ciudad de México solo tienen un espacio en la plataforma", refirió Airbnb a través de un comunicado.
Para la plataforma de alquiler, resulta sorpresiva esta nueva reforma publicada apenas el 3 de octubre, tan solo 6 meses después que la Ley de Turismo fuera reformada de manera integral, en la cual a diferencia de la reciente reforma, incluyó la participación de autoridades, anfitriones, vecinos, asociaciones hoteleras y plataformas digitales.
"Está probado que las regulaciones que buscan limitar las estancias cortas en diversas ciudades del mundo no han sido exitosas para disminuir el precio de la renta o aumentar la disponibilidad de vivienda. Por el contrario, han propiciado un impacto negativo en la derrama económica local, el desempoderamiento de pequeños emprendedores, el incremento en precios en el hospedaje tradicional y en la renta a largo plazo y la creación o aumento de la informalidad", señalaó.
La compañí citó como ejemplo de esto el caso de Nueva York, que a un año de la regulación restrictiva el precio medio de los hoteles subió 7,4% en los últimos 12 meses que terminaron en julio de 2024. "Estos precios afectan negativamente a la mayoría de los turistas que quieren viajar a Nueva York y por consiguiente a los comercios que viven de esta actividad. De igual manera, en el caso de las rentas, éstas subieron un 3,4% durante los 11 primeros meses de aplicación de esta regulación, según StreetEasy, lo que sugiere que otros factores están haciendo subir los precios de los alquileres a largo plazo", refirió Airbnb.
Golpe económico
De acuerdo con cifras de Airbnb, los viajeros que reservaron un espacio a través de la plataforma en la Ciudad de México, gastaron más de 15.000 millones de pesos (más de US$ 775.000 millones) incluido el gasto directo como estancia y servicios, así como el indirecto e inducido. Este gasto de los huéspedes en Airbnb apoyó a más de 63.000 fuentes de trabajo en la capital mexicana.
"Los espacios compartidos en Airbnb son una fuente extra de ingresos para varios residentes de la Ciudad de México. Esta es una señal positiva ya que compartir espacios en Airbnb se ha convertido en un salvavidas económico para muchos", puntualiza.
Según datos de la plataforma, aproximadamente, el 53% de los Anfitriones en Airbnb en la Ciudad de México dijeron que en el último año, el dinero que han obtenido les ayudó a permanecer en su hogar. Asimismo, cerca del 74% ha utilizado el dinero para cubrir necesidades como comida y otros gastos que se han vuelto más caros de lo que solían ser.