Se trata de los Apple Vision Pro, dispositivos que permiten ver elementos digitales integrándose en el mundo real, teniendo así un sin número de opciones, entre las que destacan la visualización de películas y series; videojuegos; videollamadas y hasta la edición de documentos.
Más que un producto, Apple presentó un nuevo concepto al que denominó computación espacial, es decir, el desarrollo de dispositivos que permiten mezclar el mundo de los átomos con el de los bits. Su apuesta en esta materia son las Visión Pro, unas gafas de realidad mixta (o aumentada), cuyo precio inicial es de US$ 3.499.
Mediante este nuevo dispositivo las personas podrán ver elementos digitales integrándose en su mundo real, teniendo así un sin número de opciones, entre las que destacan la visualización de películas y series; videojuegos; videollamadas y hasta la edición de documentos.
Hay que tener en cuenta que Apple no es la primera tecnológica en apostar a la realidad aumentada, pues otras compañías llevan años en ese campo. No obstante, sí es la primera en mostrar una apuesta capaz de ofrecer un dispositivo compatible con la mayoría de las tareas que hacemos en el día a día, incluso proponiendo el reemplazo de otros artefactos como los televisores.
Así son estas gafas de realidad aumentada
Según lo comunicado por la empresa (en el WWDC 23) este lanzamiento refleja décadas de trabajo de diseñadores de producto y desarrolladores de software, pues en el mismo hay conocimientos que ya han sido aplicados en otros dispositivos como el iPhone, el Mac y los Apple Watch.
Lo primero que podríamos mencionar de su diseño es que recuerda bastante a las gafas de realidad virtual que ha desarrollado Meta, las Oculus. Es decir, un enorme panel en el frente (que es donde están los visores, sensores y demás elementos de las gafas), amarrados a una correa que se ajusta al contorno de nuestra cabeza.
Habría que probar la sensación de tenerlas puestas, pues el gran desafío de este tipo de dispositivos es su comodidad, ya que con el paso del tiempo tienden a generar cansancio en el cuello, lo cual sería un punto en contra si se tiene en cuenta que una de las principales apuestas de este dispositivo es la visualización de series y películas.
Parte de lo que comunicó Apple en su anuncio es que dedicó un considerable esfuerzo para que los elementos que se visualizan con las gafas tengan una acertada adaptación con el espacio en el que está el usuario. Esto implica que los elementos virtuales interactúen con la luz del entorno físico, así como con los objetos que están allí para que, por ejemplo, no queden atravesando una mesa. La apuesta es que, aunque sean virtuales, se vean lo más real posible.
Parte de sus diferenciales con otras gafas es que nos permitirían transformar todo el espacio físico en una atmósfera selectiva. Por ejemplo, podríamos elegir un paisaje y transportarnos a ese ambiente, creando una sensación como si de verdad estuviéramos allí.
Una de estas aplicaciones sería, por ejemplo, recostarnos sobre nuestra cama y abrir una aplicación que nos permite recrear las constelaciones del firmamento, es decir, tendríamos nuestro propio planetario en casa.
Otro de los diferenciales, y que sería un gran avance en este tipo de dispositivos, es que no se requiere de controles físicos para interactuar con el contenido virtual. Las gafas tienen unos sensores capaces de reconocer los gestos que hacemos con nuestras manos. Podemos, por ejemplo, agrandar o disminuir el tamaño de las pantallas virtuales que aparecen frente a nosotros, navegar entre un menú de contenidos, pasar de páginas o hacer scroll en artículos en línea.
Estas gafas también permiten interactuar con el asistente de voz de Apple, Siri. Este aparecerá como una burbuja colorida de tres dimensiones, y estará atenta para atender nuestras peticiones. Por cierto, parte de las novedades que trajo la marca de la manzana en su evento es que para activar a su asistente ya no será necesario el comando “oye Siri”, sino solamente bastará con decir “Siri”.
Algo que (por lo menos desde lo que se vio en la presentación) no genera una buena impresión, es el sistema que Apple empleó para simular que estamos viendo a las personas mientras usamos las gafas. Cuando estas no están activadas se aplica una especie de transparencia, que permite ver el rostro de las personas, pero cuando hay contenido proyectándose en las mismas, estas recrean nuestros ojos (pero se ve muy virtual y no es para nada agradable).
Sin embargo, Apple promete que podemos interactuar con otras personas (en el mundo real) mientras estemos usando las gafas. Por ejemplo, si estamos viendo una presentación, y hay una persona que justo se para en frente de nosotros, el sistema podría reconocer la silueta de la misma y darle un espacio para que podamos verla, sin perder de vista la presentación.
Otra de las grandes apuestas de Apple es integrar este dispositivo con otras aplicaciones o servicios. Por ejemplo, mediante iMessage, se podrán enviar imágenes en tres dimensiones. El usuario de las gafas podrá descargarlo y llevarlo a su mesa (física) de trabajo, para interactuar con el mismo.
Otra de sus características es la posibilidad de grabar vídeos y tomar fotografías, amén de ver películas en tres dimensiones y audio espacial.
Este producto también cuenta con su primera gran alianza, la cual es Disney. Para los usuarios de estas gafas se promete una experiencia diferente en la plataforma de Disney +. Por ejemplo, si se va a ver alguna serie o película de Star Wars, la plataforma mostrará el contenido, pero adecuado en una atmósfera espacial.
A esto se suma experiencias exclusivas con otras franquicias como Marvel y hasta personajes de la animadora (como Mickey Mouse) en versión de realidad aumentada.
Para el desarrollo de este producto Apple desarrolló un nuevo chip, el cual es el R1, especialmente diseñado para el procesamiento de la realidad virtual, a lo que se suma el desarrollo de su propio sistema operativo, el Vision OS.
A todo esto se suma una api que le permitirá a desarrolladores externos crear productos pensados para ser usados con las gafas, así como un nuevo mecanismo de seguridad llamado Optic ID, el cual permite el desbloqueo del dispositivo mediante el iris de los ojos.
Habría que probar si tanto bombo que ofrece Apple con este nuevo dispositivo es merecedor de la calificación de “innovador” y “disruptivo”, y más teniendo en cuenta que su precio es rondea los 15 millones de pesos colombianos.