La normativa facilita la importación privada de combustibles con precios definidos y procesos simplificados, diferenciando estos productos de los subvencionados.
Tras mucha especulación y retraso en su oficialización, el Gobierno de Bolivia, a través de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), dio a conocer este viernes los precios referenciales para la comercialización de combustibles importados por empresas privadas, culminando la implementación del Decreto Supremo 5271, por lo que los interesados ya pueden iniciar los trámites.
Según la normativa, el litro de gasolina RON 85-94 costará US$ 1,20 (Bs 8,35, según el tipo de cambio oficial), mientras que la gasolina de mayor octanaje (RON superior a 94) tendrá un precio de US$ 1,25 (Bs 8,7). Por su parte, el precio del litro de diésel se fijó en US$ 1,24 (Bs 8,63).
PRECIOS
Estos precios estarán sujetos a actualizaciones periódicas, dependiendo de las fluctuaciones en los costos internacionales del petróleo. Germán Jiménez, director de la ANH, explicó que la referencia se calcula con base en índices globales que reflejan las variaciones diarias del mercado.
Por ello, el precio es únicamente referencial, “como una guía de costos”, pero se lo podría encontrar a un costo más elevado o más económico dependiendo de dónde se pretenda realizar la importación.
Inicialmente, la fijación de los precios debía realizarse para el miércoles, pero se retrasó hasta este viernes, sin explicarse los motivos.
De esta manera, se prevé que para la próxima semana comiencen a llegar los combustibles por parte de los privados para la comercialización y regularizar el abastecimiento de diésel.
Estos sectores esperaban conocer los precios, debido a que la reglamentación prohíbe que quienes vendan los carburantes importados puedan vender combustibles subvencionados por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
En ese sentido, conocer los precios permitirá evaluar a los privados si los precios serán competitivos con el diésel subvencionado, que se comercializa a Bs 3,72 (US$ 0,52).
REGLAMENTACIÓN
La implementación del decreto incluye medidas adicionales para garantizar transparencia y diferenciación. Los combustibles importados serán identificados con colores distintos en las estaciones de servicio para evitar confusiones con los productos subvencionados por el Estado, que continúan siendo comercializados por YPFB a precios significativamente más bajos.
Asimismo, se establecieron ventanillas únicas en Santa Cruz y La Paz para simplificar los trámites requeridos para la importación. En estas oficinas, trabajan conjuntamente YPFB, la ANH, la Aduana Nacional y la Dirección de Sustancias Controladas, facilitando el ingreso de combustibles al país.
Con estas acciones, el Gobierno de Luis Arce busca garantizar el abastecimiento de combustible en Bolivia mientras promueve la participación privada en el mercado energético, en un contexto de demanda creciente y fallos en la logística de distribución.