La firma de telecomunicaciones hoy es la única empresa de Latinoamérica que tiene un acuerdo con Starlink para ofrecer servicio de cobertura satelital para sus clientes móviles en Chile y Perú, pero adelanta la incorporación de más proveedores.

Los 55 años del alunizaje de la misión Apolo 11 fue la excusa perfecta para que la firma de telecomunicaciones chilena Entel celebrase sus 60 años de existencia y reavivara su compromiso por las comunicaciones satelitales.

Bajo el lema “Un futuro con historia”, ejecutivos de la telco y autoridades del sector chileno recordaron que, gracias a la existencia de la estación satelital de Longovilo, distante a una hora y media de Santiago, permitió que  Chile fuese el único país latinoamericano en transmitir esta hazaña estadounidense en directo, gracias a la tecnología que desarrolló como la estatal Empresa Nacional de Telecomunicaciones, a fines de los años sesenta. 

“Este es un hito muy simbólico en la historia de la empresa y refleja nuestro espíritu por estar a la vanguardia tecnológica, pero también de ser ingeniosos y valientes para acercar esta tecnología a las personas. En este caso se tuvo que girar la antena de recepción satelital, fuera del protocolo, para aprovechar una oportunidad que se dio, y llegar así con la transmisión en vivo”, explicó el gerente general de Entel, Antonio Büchi. 

En la audiencia, lo miraban atento algunos de los ingenieros que hicieron posible ese logro, junto a autoridades de gobierno, el expresidente chileno Eduardo Frei - hijo del presidente homónimo que en la década de los sesenta impulsó la creación de Entel- y personajes del sector de  las telecomunicaciones.

También fue el momento en que el CEO de la firma, que se finalizó de privatizar en 1992, reafirmó que los satélites vuelven en gloria y majestad a jugar un rol relevante en telecomunicaciones.

“Hoy estamos viendo un revival del mundo satelital. Entel fue líder en entrar a este mundo satelital, lo fue después en las comunicaciones móviles, las comunicaciones por fibra óptica. Y hoy vemos de vuelta este espacio satelital que está conectando a todo el mundo en los lugares donde no llega la señal.  Eso lo están logrando hoy en día empresas que de nuevo tienen la visión y la capacidad de tomar riesgos y de hacer algo para cambiar el mundo”, recalcó Büchi.

Su declaración fue en referencia al convenio que tiene con Starlink, de Elon Musk, para llevar internet a lugares apartados.

Pero también esta alianza permitirá muy pronto “conectar directamente los satélites a los celulares, común y corriente, en cualquier lugar del mundo. Y ese es el futuro que estamos empezando a vivir hacia adelante”, agregó el CEO. 

Ya en diciembre pasado se había difundido la alianza con Space X, compañía madre de Starlink, para habilitar el servicio en Chile y Perú. Y se espera que esta alianza esté activa a finales de 2024, mediante la tecnología “Direct to Cell”.

Como destacan en la telco, Starlink tiene alianzas con otras firmas de telecomunicaciones como T-Mobile en Estados Unidos, Optus en Australia, Rogers en Canadá, One NZ en Nueva Zelanda y KDDI en Japón, pero en Latinoamérica solo lo ha acordado con entel.

También la firma informó durante abril en su junta ordinaria de accionistas que invertiría US$ 618 millones -lo que equivale al 19,7% de sus ingresos- para consolidar su liderazgo en el negocio móvil, expandir su red de fibra óptica y posicionarse como pionera en tecnologías de vanguardia como 5G y conectividad satelital.

INDUSTRIA SATELITAL LOCAL

Chile está apurando el paso en materia satelital, para estar acorde a las tecnologías y regulaciones satelitales.

Así lo indicó a AméricaEconomía Claudio Araya, Subsecretario de Telecomunicaciones.

“Ha habido un cambio de paradigma en la forma en la cual se conciben los proyectos de conectividad digital satelital y, producto de ese cambio de paradigma tuvimos una necesidad de acelerar [las medidas]”, destacó la autoridad.

Esto se ha abordado mediante un comité asesor ministerial aeroespacial, que está abocado a actualizar la política nacional aeroespacial.

“Junto al remozamiento de la política, se creó un modelo que llamamos sistema nacional satelital, que es un proyecto a muy largo plazo en el cual aspiramos a lanzar satélites estacionarios y también satélites de órbita baja que nos permitan cierta autonomía estratégica”, agregó Araya. 

Este sistema nacional satelital ya está conceptualizado, y la autoridad chilena busca operativizar las distintas etapas que vendrán, lo que implica construir estaciones terrenas para desarrollo de sistemas satelitales, la primera de las cuales parte en el segundo semestre. 

“En el fondo pusimos el acelerador y estas cosas están empezando a suceder. Dentro del marco regulatorio no hay modificaciones legales, pero sí la política nacional tuvo un cambio para dar cuenta de cómo cambió la industria satelital en los últimos cinco años”, detalló. 

Además de propiciar una naciente industria local aeroespacial, Araya también destacada la necesidad de contar con tecnología para necesidades estratégicas del país. 

Los números proporcionados por Subtel en abril de este año también evidencian un crecimiento sostenido en las conexiones satelitales residenciales chilenas, las que crecieron 88,4% entre abril de 2023 y abril de este año y 163% en lo que va de Gobierno. 

MÁS SATELITES Y DIRECT TO CELL

A través de una constelación de satélites que utiliza una órbita terrestre baja, Starlink ofrece Internet de banda ancha en distintas latitudes. 

Este año, la firma ya anunció que planea expandir su servicio Direct to Cell a celulares LTE de Chile y Perú. Primero con mensajes de texto para localidades remotas. En un año más con servicio de datos y voz para llamadas y navegación. 

Ese beneficio llegará sin necesidad de hacer cambios en los equipos, ya que tanto desde Entel como desde Starlink se ha dicho que bastará con tener el estándar de conexión LTE (Long Term Evolution) para su funcionamiento.

“El lanzamiento de las nuevas constelaciones de baja órbita que van a ir reemplazando a los satélites geoestacionarios anteriores va a permitir cerrar la brecha digital rápidamente. Ya se han firmado tres acuerdos con Starlink, y estamos a la espera también de las nuevas constelaciones que van a entrar a competir con Starlink a futuro”, adelanta a AmericaEconomía el experto en redes satelitales de Entel, Guillermo Cifuentes. 

La razón es que la telco quiere contar con varios proveedores, para permitir mejorar aún las condiciones tanto técnicas como económicas para cerrar la brecha digital. 

Así, además de Starlink, que ya tiene más de 6.000 satélites, viene la apuesta de Amazon Kuiper, que tiene dos satélites en prueba y una pequeña estación de monitoreo en Longovilo.

“Después viene ya el lanzamiento masivo, y se espera que para el 2026-2027 contemos con, al menos, dos o tres actores más. Entonces va a haber una competencia y, por supuesto, eso va a ser un beneficio para cerrar la brecha digital y del precio del servicio”, concluye el experto.