Un investigador de la Escuela Superior Politécnica del Litoral de Ecuador (Espol) explica cómo se daría ‘apagón industrial’ y advierte que si no llueve en lo que queda de diciembre “seguramente” habrá cortes en enero.

Un “apagón industrial” se aplicaría a partir del 15 de diciembre en Ecuador y se extendería hasta de fines del mes, anunciaron representantes del sector. La medida abarcaría a las empresas que se encuentran en los segmentos de consumo Alto Voltaje (AV) 1 y Alto Voltaje (AV) 2.

El docente e investigador de la Facultad de Ingeniería en Electricidad y Computación (FIEC) de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol), Iván Endara, explica que se trata de un proceso que es “posible y sencillo” y da ejemplos de empresas en las que se registrarían los racionamientos y por ello deberán trabajar con autogeneración de energía.

Además, el máster en Electricidad y máster en Derecho Energético advierte que si bien el Gobierno de Daniel Noboa anunció la suspensión de los cortes para el sector residencial a partir del 20 de diciembre, “no significa que se ha solucionado la crisis eléctrica del país, sino representa un respiro temporal al sector residencial”.

- Para el sector industrial se ha anunciado un apagón desde el 15 de diciembre ¿en la parte técnica cómo funcionaría este proceso o cómo lo podría aplicar el Gobierno?

Transelectric y las distribuidoras tienen alimentadores exclusivos para los denominados grandes consumidores, que son aquellos que se mencionan en el anuncio del Gobierno.

De esta manera hacer cortes focalizados a la gran industria es posible y sencillo, únicamente se debe abrir el interruptor de dichas líneas y automáticamente la industria correspondiente queda sin energía.

Esto debido a que estas industrias representan un consumo significativamente alto para el Estado, siendo así que podrían llegar a representar inclusive el consumo de una pequeña ciudad.

De este modo se afecta a menos individuos pero con un gran impacto de ahorro energético.

- La medida aplicaría para quienes se encuentran en el sector AV 1 y AV 2, ¿quiénes integran este sector?

Este sector está conformado por las grandes industrias, de alto consumo y demanda energética.

Como ejemplo se puede hacer mención a cementeras como Holcim, acereras como Novacero, grandes mineras y petroleras y otras industrias de alto consumo (que se asocia a alta producción) como Cervecería Nacional o Unilever, y en ciertos casos grandes consumidores como un gran centro comercial como Mall del Sol.

Esta industria corresponde a las que mayor consumo tienen en el país, y que debido a su alta demanda requieren tener su red independiente desde las grandes subestaciones de transmisión.

- ¿Cómo está dividida la demanda de energía en el país?

En el pliego tarifario del servicio público de energía utilizado por el Ministerio para determinar los distintos niveles de voltaje y demandas que tiene el país, se observa que pasado los 40 8 kilovoltios (kV) de voltaje ya se considera una demanda del tipo AV 1.

En otras palabras, aquellas industrias que requieren subestaciones para conectarse al sistema eléctrico seguramente forman parte del grupo AV 1 y AV 2 y serán las afectadas por el anuncio del Gobierno.

- ¿De qué depende que no se repitan los apagones?

Asegurar un sistema óptimo, eficiente y seguro en el país, que permita una continuidad en el servicio eléctrico, va a depender actualmente de que existan lluvias continuas y permanentes en los afluentes de las hidroeléctricas.

Al tiempo que a mediano plazo lo debería asegurar el Estado ecuatoriano con las inversiones suficientes y necesarias para cubrir la energía no suministrada por las hidroeléctricas durante las épocas de estiaje.

Es importante de igual manera entender que el no tener apagones en los hogares estos últimos 10 días de diciembre no significa que se ha solucionado la crisis eléctrica del país, sino representa un respiro temporal al sector residencial, que de no darse fuertes lluvias en lo que queda del mes de diciembre, seguramente volverán a percibir los apagones en enero.

De igual forma, el Estado ha demostrado por años que no posee la fuerza suficiente para realizar las inversiones necesarias en sectores críticos, como eléctrico y petrolero, por lo que es recomendable abrir las puertas a un libre mercado, y enfocarse en ser un Estado regulador, mejorando todo el marco legal del país para permitir el ingreso a la empresa privada protegiendo las inversiones, al tiempo que proteja al país ante empresas poco confiables.

De esta manera se tendría un Estado regulador que requiere inversión mínima, y obtiene los mejores beneficios de la empresa privada.