"Estamos en mercados (...) con muchísimo potencial y recorrido al alza, como son México, Brasil y por supuesto Estados Unidos", indicó Ana Botín, presidenta del banco.
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, ha estimado que en 2024 la entidad seguirá mejorando sus métricas, incluida la rentabilidad, lo que llevará al beneficio neto a alcanzar los US$ 13.001 millones.
En una rueda de prensa con motivo de la publicación de sus resultados anuales, Botín ha indicado que la estimación para el año que viene del banco se limita a que la ratio de capital CET1 supere el 12% y que los ingresos crezcan a un ritmo de dígito medio. Con estas pistas, ha indicado que la cifra final de beneficios "debería empezar por 12".
Este nivel de beneficios supondrá que Banco Santander lograría unas ganancias netas récord por tercer año consecutivo. Hoy miércoles ha informado de que cerró 2023 con un beneficio de US$ 12.000 millones, una cifra sin precedentes para el banco.
Además de las previsiones de ingresos y capital, el banco espera lograr un retorno sobre capital tangible (RoTE, por sus siglas en inglés) del 16%, al tiempo que el coste del riesgo se situará en el entorno del 1,20% y la eficiencia caerá por debajo del 43%.
El incremento en los beneficios a pesar de la previsible senda a la baja de los tipos de interés en Europa se debe a la diversificación geográfica del banco. "Tenemos mercados donde los ciclos no suelen ser lo mismo, esto es una diversificación que es muy positiva en cuanto al capital", ha puntualizado Botín, que estima que durante 2024 "Europa va a tirar menos y las Américas van a tirar más".
"Estamos en mercados (...) con muchísimo potencial y recorrido al alza, como son México, Brasil y por supuesto Estados Unidos", ha indicado.
En este sentido, Botín ha recordado que 2023 ha sido el primer año del nuevo plan estratégico y de transformación del banco, y que se ha saldado con un "rendimiento extraordinario". "Si el año 23 ha sido bueno, el 24 va a ser aún mejor", ha afirmado, a pesar de los riesgos geopolíticos en el horizonte.
De su lado, el consejero delegado de Banco Santander, Héctor Grisi, ha indicado que la entidad financiera no espera "ningún signo de deterioro de la calidad crediticia en ninguna de las unidades" de negocio. "Es importante recalcar que la calidad crediticia está diversificada por segmentos, por productos y por países", ha enfatizado.
Sobre los resultados contabilizados en 2023, el banco también ha informado este miércoles de que espera tener que abonar unos US$ 366,7 millones en concepto del nuevo impuesto extraordinario a la banca.
En todo caso, la directiva ha rechazado la posibilidad de que el gravamen extraordinario se vuelva permanente, aludiendo a que "en ningún país del mundo" se prevé un impuesto extraordinario sobre la banca más allá de 2024.
De esa forma, la presidenta ejecutiva de Santander ha pedido que "no se penalice" a un sector por unos beneficios, haciendo referencia a que el margen de clientes es del entorno del 2%. "Nos parece que lo que hay que hacer es que todos los sectores paguen lo mismo", ha recalcado.
RETRIBUCIÓN DE DIRECTIVOS
Preguntada por el destope de los bonus de los banqueros en la Unión Europa, una medida ya aprobada en Reino Unido y celebrada por la propia Botín, la presidenta del banco ha indicado que "sería bueno para todos el que hubiera más flexibilidad" en la distribución entre remuneración fija y variable.
En lo referente al interés que se paga a los clientes por sus depósitos, Botín ha indicado que España está entre los países donde más barato se da el crédito y que, en todo caso, el ahorro en España está disperso en cuentas transaccionales con saldos pequeños.