De acuerdo con empresarios, hace falta especialización en la mayoría de las regiones del país que atienda los requerimientos de Asia en términos de arquitectura, así como en ejecución de obra. El tema cultural es otro de los principales retos. 

No solamente lograr el abastecimiento energético e incrementar la disponibilidad de tierra son los retos principales que tienen los estados de México para aprovechar el nearshoring, ya que también necesitan especializarse en el tema de construcción para satisfacer la demanda de las empresas asiáticas, aseguró Pedro Valdés, CEO de Escala, empresa especializada en la ejecución de proyectos industriales.

En entrevista con El Economista, el empresario explicó que desarrollaron un análisis de mercado sobre las naves industriales que se han ejecutado en los estados, así como de todo proyecto inmobiliario relacionado con el auge de la relocalización de empresas de proveeduría.

Los resultados arrojaron que cerca de 51% de los proyectos los encabezan clientes provenientes de Asia: 40% de China y 11% de Japón.

Con esta demanda, como constructora también identificaron que hace falta mano especializada en casi todas las regiones de México que atienda los requerimientos de Asia en términos de arquitectura, así como en ejecución de obra, e incluso, hasta traductores y gente que explique la normatividad a nivel local y federal.

“Es uno de los principales retos, estamos muy acostumbrados a trabajar con las empresas americanas y de manera más reciente con las empresas europeas. Los americanos ya nos conocen, ya hemos trabajado y ya conocen las prácticas o las normas, la normatividad que existe en México, pero con las empresas asiáticas estamos haciendo la tarea desde cero”, expuso.

Pedro Valdés aseguró que quizá unas de las brechas que pesan más para los empresarios asiáticos es la parte de entrega de tiempos, ya que las compañías de esta parte de Oriente pretenden que se les entreguen los proyectos en el menor lapso, debido a que necesitan satisfacer la demanda y lograr generar utilidades.

“El tema cultural pesa, desde la incertidumbre que tienen ellos, de que si en México sabemos construir, de que si podemos lograr los tiempos y podemos cumplir con sus especificaciones de diseños. Como sector esto es algo que vivimos con las empresas europeas hace cinco o seis años, pero con las empresas asiáticas el reto es mayor, porque vienen en ola”, recalcó.

“Lo que nos están pidiendo con esta demanda de espacios es hacer más metros cuadrados más rápido. A las empresas asiáticas les interesa mucho que se construya un edificio rápido, en cuatro meses, en cinco meses”, añadió.

Sobre qué región o entidad federativa es la más apta actualmente ante este reto, el empresario aseguró que la población del norte es la más preparada para poder adaptarse a las necesidades de estas compañías asiáticas.

“Tiene mucha mano de obra calificada. Por ejemplo, en Nuevo León hay 150 universidades tanto de técnicas como profesionales, está la escuela de ingeniería más grande en México, que es la Universidad Autónoma de Nuevo León. En Nuevo León se gradúan 22.000 técnicos. Entonces tanto la parte técnica, como ingeniería, o directiva, afortunadamente en esta zona se está produciendo constantemente”, reiteró.

REGULACIÓN 

Como factor adicional a este reto que se está teniendo en materia de construcción y de nearshoring, el empresario destacó que está la parte sobre qué región del país da mayores facilidades administrativas para ejecutar proyectos.

Sobre ello, ahondó que el norte nuevamente es la “región ganadora”, ya que cuenta con procesos más simplificados. Como muestra, subrayó que en el análisis que hicieron está que Nuevo León capta 50% de los proyectos de construcción y Coahuila 11%.

“Se necesitan menores tiempos de respuesta. Una nave antes nos tomaba más de ocho o 10 meses, pues ahora se tiene que hacer en menos de seis meses”, comentó.