La calificadora dijo que podría tener un efecto crediticio negativo en el soberano.
Petróleos Mexicanos (Pemex) experimentó un incremento de 82% en el número de pozos productores en el periodo de 2019-2023.
De acuerdo con Pemex, el número de pozos exploratorios, en el periodo 2019-2023, en relación con el de 2014-2018, incrementó de 34 a 62 pozos productores.
Los pozos perforados en el mismo periodo aumentaron 36% al pasar de 114 a 156 perforados.
A partir de la excelencia operativa, Pemex ha reducido los tiempos de perforación de pozos y acelerado la producción temprana en campos prioritarios, publicó la empresa en sus redes.
Octavio Romero Oropeza, director general de la petrolera estatal, aseguró que la estrategia de contrarrestar la declinación natural de los yacimientos en campos maduros es una tarea desafiante pero crucial. En línea con ello, se diseñó y continuará implementando un "ambicioso" programa de perforación de pozos a lo largo de este año.
"Pemex dio prioridad a la exploración y el fortalecimiento de sus reservas probadas, lo que tuvo como consecuencia una reducción en los costos de descubrimiento, alcanzando un precio de US$ 3,4 por barril. Esta cifra se encuentra por debajo del promedio global de US$ 3,8 e incluso es inferior a la de compañías como Shell, Equinor y Petrobras", declaró el directivo.
En las actividades de exploración y producción, se logró una disminución tanto en el tiempo como en los costos de perforación, con ello, la aceleración de los procesos de producción se estableció y se tradujo en un promedio de 1 millón 867.000 barriles por día de producción de hidrocarburos líquidos en junio de este año. Esta cifra supera en 112.000 barriles la producción del mismo período del año anterior.
A su vez, el director de Pemex Exploración y Producción (PEP), Cid Munguía, enfatizó la determinación de seguir adelante con la estrategia, la cual se centra en el desarrollo rápido de campos nuevos, la incorporación de producción temprana de pozos exploratorios y la mitigación de la declinación.
Por otro lado, la calificadora Fitch Ratings advirtió que, si el gobierno mexicano aumenta sustancialmente su apoyo financiero a la petrolera estatal Pemex, podría tener un efecto negativo en la calificación crediticia del país. Fitch rebajó la calificación de incumplimiento de Pemex en julio y también revisó a la baja la valoración de sus notas internacionales en circulación.
A pesar de los recursos millonarios que el gobierno ha inyectado en la empresa, Pemex reportó un aumento en su deuda financiera. La calificadora Moody's también rebajó la perspectiva de las notas de Pemex.
Fitch estima que el gobierno seguirá apoyando financieramente a la empresa, pero no garantizará su deuda ni proporcionará una inyección de capital significativa. Se espera que el respaldo financiero anual se mantenga en al menos US$ 15.000 millones, cubriendo las amortizaciones de la deuda de bonos internacionales de Pemex.