La petrolera tiene amortizaciones de deuda por US$ 7.500 millones en 2023 y US$ 8.900 millones en 2024, de acuerdo a Moody`s.
Pemex está en conversaciones con el Gobierno sobre un nuevo apoyo para el pago de amortizaciones de deuda del primer trimestre de 2023, dijo el director general de la petrolera estatal mexicana, Octavio Romero.
El gobierno había asumido desde el año pasado el pago de las amortizaciones de la deuda de Pemex con el argumento de dejarle recursos a la empresa para inversiones; sin embargo, interrumpió esa práctica tras el primer trimestre de 2022, en medio de los altos precios del crudo.
"Estamos en pláticas con (la Secretaría de) Hacienda, sobre todo, para el primer trimestre del próximo año, donde tenemos amortizaciones fuertes", dijo Romero en una reunión con periodistas la tarde del martes.
"La hemos pagado, no es fácil. Aún cuando el precio (del crudo) ha estado muy bueno, en meses anteriores llegó un punto" en que era financieramente difícil, explicó al preguntársele sobre la deuda de la empresa.
El director de Finanzas de Pemex, Carlos Cortéz, precisó que las amortizaciones para el primer trimestre suman unos 4,000 millones de dólares.
La petrolera tiene amortizaciones de deuda por US$ 7.500 millones en 2023 y US$ 8.900 millones en 2024, de acuerdo a Moody`s.
Pemex, con una deuda financiera de US$ 105.000 millones al tercer trimestre del año, ha recibido otros apoyos gubernamentales, como inyecciones de capital, además de reducciones en la tasa del Derecho de Utilidad Compartida (DUC), el gravamen más significativo que paga, actualmente en el 40%. Cortéz consideró "complicada" una nueva rebaja en el DUC, pues se ha llegado a "un tope" con la tasa del 40%.
En julio, Moody`s rebajó las calificaciones de Pemex citando sus altos vencimientos de deuda y la necesidad de financiamiento externo dadas las constantes pérdidas en el negocio de refinación.
La petrolera reportó una pérdida neta de 52.000 millones de pesos en el tercer trimestre debido a un incremento en el costo de ventas y pérdidas cambiarias por la depreciación del peso frente al dólar, aunque sus ingresos se elevaron 56,5% interanual, ante mayores volúmenes de ventas.
Romero, una de las personas más cercanas al presidente Andrés Manuel López Obrador, reiteró su confianza en que Pemex cerrará 2022 con ganancias y una producción de petróleo de 1,9 millones de barriles por día (bpd) y que en 2023 la empresa alcanzará la meta de 2,0 millones de barriles por día.
"Cuando yo les digo que vamos a llegar (...) a una cifra mayor de producción el próximo año (2023) es porque estamos en pleno desarrollo de Quesqui y de Ixachi, de Tupilco", dijo el funcionario.
Añadió que se planean perforar de manera acelerada varios pozos en lo que resta del año en esas zonas, "lo que nos da la seguridad de que va a haber un incremento en la producción el próximo año".
Refinería Deer Park
Pemex busca elevar su producción de crudo pero ya no con la mirada puesta principalmente en el mercado exportador, como hizo durante muchos años, sino para elevar su producción de combustibles y cumplir con la encomienda de López Obrador de lograr la autosuficiencia en gasolinas.
Con ese propósito, Pemex está construyendo una polémica nueva refinería, en Dos Bocas, Tabasco, y adquirió a su socia, la angloholandesa Shell, su 50% de una planta en Deer Park, Texas.
El director de comercialización de Pemex, Alberto Velázquez, aseguró que actualmente se envía desde Deer Park a México un 25% de la producción total de gasolinas y diésel de la refinería pero que esos porcentajes crecen "mes con mes".
El funcionario estimó que Pemex pueda disponer en el primer semestre del 2024 del 100% de la producción de combustibles de Deer Park para enviar a México, si así se decide.
De acuerdo a datos presentados por los funcionarios de Pemex en la reunión, Deer Park procesa 284.000 bpd de crudo y produce 104.000 bpd de gasolinas.
"Se están haciendo todas las adecuaciones. La idea es que hacia el primer semestre de 2024 prácticamente se pueda disponer de la totalidad de la producción de Deer Park, ya sea a través del ducto Brownsville-Reynosa o por barco", sostuvo Velázquez.
"Va a depender mucho de la logística ya integral porque también tenemos, es una realidad, el incremento de la producción nacional, y es una cuestión básicamente de si nos sale más caro traer el producto de Deer Park por la logística", subrayó.
En todo caso, estimó, se podría llevar hacia la zona fronteriza entre México y Estados Unidos.