Las comunidades ecuatorianas reclaman por la falta de atención a la contaminación ambiental debido a derrames de crudo.

La petrolera estatal Petroecuador no cuenta con insumos para contener derrames de crudo. Así señala un informe del departamento de Restauración Ambiental que avala la contratación de estos materiales por un monto de US$ 257.133 y que adjunta un certificado de la no existencia de los materiales, emitido por la bodega de la entidad del Estado ecuatoriano.

“Al momento no se cuenta con stock de estos insumos”, recalca el documento de la petrolera que menciona la necesidad de los productos “considerando la frecuencia en los últimos años de los eventos ambientales provocados por fatiga de material, fallas operativas y principalmente atentados”.

Los insumos a los que hace referencia comprenden materiales absorbentes, barreras de contención, desengrasantes/dispersantes, rollos de tela, musgo absorbente, paños o polvos.

“La operación hidrocarburífera interactúa mediante sus aspectos ambientales con el entorno, pudiéndose producir fugas y derrames con causas relacionadas a la fatiga y obsolescencia del material, falla humana, falla de los sistemas, atentados (robos y pinchazos intencionales), entre los principales”, menciona la estatal Petroecuador en su informe.

Además advierte que “estos eventos de diferente magnitud, en función de las circunstancias técnicas y ambientales del sector en donde se produce, puede impactar en los factores ambientales en diferente grado, ocasionando, por un lado, afectación al ambiente, a las comunidades y por otro lado posibles sanciones por parte de la autoridad ambiental, así como demandas de afectados y pérdidas económicas al Estado”.

Los eventos ambientales –detalla Petroecuador- requieren de atención inmediata por parte del área operativa, la que requiere de materiales e insumos de contingencia.

Este año, según denunció el abogado ambientalista Pablo Fajardo, se han presentado al menos ocho derrames petroleros en las provincias de Orellana y Sucumbíos, uno de ellos el pasado lunes 26 de agosto, en el bloque 16, en la comuna kichwa San Antonio, en la parroquia Sacha, en Orellana.

“Los derrames son constantes en los distintos campos operados por Petroecuador, y hay un problema grande: los derrames no están siendo reparados, ni siquiera remediados”, reclamó Fajardo, quien cuestionó el trabajo de control que ejerce el Ministerio del Ambiente como autoridad y reclamó porque asegura que Petroecuador no aplica planes de contingencia en las comunidades afectadas, tampoco acciones de prevención ni políticas de no repetición.