Según la agencia calificadora, la condición operativa y financiera de Petroperú se ha debilitado como resultado de problemas inesperados y la consiguiente paralización en una de las unidades de Talara.
S&P ha decidido rebajar la calificación crediticia de Petroperú a 'B' desde 'B+', al mismo tiempo que ha optado por poner la nota de solvencia de la compañía petrolera bajo vigilancia, con implicaciones negativas.
La colocación de la calificación bajo vigilancia obedece a las previsiones de S&P que recogen que se podría dar una nueva caída a 'B-' o menos en los próximos tres meses.
Esto se da con arreglo a la necesidad de la compañía de obtener un consentimiento de exención para evitar un incumplimiento técnico debido a su retraso en la obtención de las declaraciones auditadas.
Según la agencia calificadora, la condición operativa y financiera de Petroperú se ha debilitado como resultado de problemas inesperados y la consiguiente paralización en una de las unidades de Talara.
Los acontecimientos recientes han planteado dudas sobre el vínculo del gobierno con Petroperú, aunque en esta etapa todavía esperan que el gobierno intervenga para evitar un incumplimiento de pago.
