Los supermercados del país empezaron hace meses a restringir o evitar la entrega de bolsas plásticas, antes de que este domingo entre en vigencia una de las medidas más restrictivas de América Latina contra estos productos.
Santiago. La escena se ha vuelto frecuente en los grandes comercios de Chile: clientes que olvidan sus bolsas reutilizables y se ven obligados a apilar en sus brazos los productos que compran.
Los supermercados y grandes locales minoristas del país empezaron hace meses a restringir o evitar la entrega de bolsas plásticas, antes de que este domingo entre en vigencia una de las medidas más restrictivas de América Latina contra estos productos.
"Esto implica que vamos a cambiar nuestra cultura y que cada persona deberá llevar su bolsa reutilizable para no seguir contaminando nuestros mares, nuestros ríos", dijo a periodistas la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt.
El Congreso chileno aprobó el mayo una ley impulsada por el Gobierno de centroderecha para vetar el uso de bolsas plásticas en todos los comercios y en los primeros seis meses de vigencia la iniciativa permitió eliminar 7.350 toneladas de estos residuos, el equivalente al peso de 6.300 autos compactos.
Expertos calculan que cada año se consumen 5 billones de bolsas plásticas en el mundo, en su mayoría elaboradas con polietileno, un derivado del petróleo que tarda más de 400 años en degradarse.
En el último semestre, Chile dejó de usar 1.000 millones de bolsas de plástico, según cifras del Gobierno.
La ley ambiental del país sudamericano también exige el retiro gradual de las bolsas plásticas de los negocios y microempresas en el mediano plazo.
Los supermercados y grandes tiendas ahora están obligados a ofrecer productos reciclables fabricados en tela o papel, un asunto que también causa controversia por el eventual impacto en los bosques ante una mayor demanda de pulpa de celulosa.
"Me preocupa que se pueda generar una deforestación para atender el consumo de bolsas de papel, porque después podrían empezar a plantar árboles que serían más dañinos", dijo a Reuters Rosa Leal, una trabajadora independiente de 33 años.
En Latinoamérica, países como Costa Rica y Panamá mantienen fuertes restricciones a la utilización de plásticos, mientras que en México y Argentina se han prohibido las bolsas desechables en algunas ciudades.