Empresarios hoteleros del Caribe mexicano advirtieron que el sector se verá afectado por la quiebra del operador Thomas Cook ya que de agosto a diciembre llegan la mayoría de los 100.00 turistas ingleses que visitan la zona.
Las paradisíacas playas de Cancún y la Rivera Maya en el Caribe mexicano, afectadas en esta temporada por la invasión del sargazo y casos de inseguridad, suma una nueva desgracia con la quiebra del operador Thomas Cook, que reducirá de forma sensible la llegada de turistas británicos a la zona.
El director general del Grupo Palace Resorts, reconoció en declaraciones a la agencia Efe que la caída de Thomas Cook "golpea" fuertemente a la industria turística de Cancún y la Riviera Maya, ya que la operadora británica se encontraba entre las primeras 12 agencias con más llegadas a esos destinos.
"La ventaja del mercado inglés es que venía en temporada baja. De agosto a diciembre, que es cuando los hoteles más lo necesitan, el hueco que deja esperamos que pronto se llene a través de otras agencias", expresó el empresario.
Luego de varios años de mantener niveles promedio por arriba del 80% de ocupación, tanto Cancún como Riviera Maya han registrado cifras que rondan el 70%.
A esta situación han contribuido fuertemente la imagen de inseguridad y el recale de grandes cantidades de sargazo que han cambiado drásticamente la belleza natural de las playas.
La zona del Caribe mexicano recibe al año un promedio de 100.000 turistas ingleses, de los cuales el 20 % llegan a Cancún y el 80 % a la Riviera Maya, de los cuales, un porcentaje considerable correspondían al sector de jubilados y pensionados.