El fabricante de aviones más grande del mundo cumplió este miércoles con la fuertemente rebajadas estimaciones de ganancias trimestrales de Wall Street, en gran parte debido a la detención de las entregas de los 737 MAX y una desaceleración en la producción.
Boeing Co abandonó este miércoles sus perspectivas financieras para 2019, suspendió una recompra de acciones y dijo que su producción disminuyó por la cancelación de vuelos de su avión 737 MAX tras dos accidentes fatales en cinco meses, lo que hasta el momento le ha costado al menos US$1.000 millones.
El fabricante de aviones más grande del mundo enfrenta una de las crisis más grandes en sus 103 años de historia tras los accidentes protagonizados por aviones de las aerolíneas Lion Air, en Indonesia el 29 de octubre, y Ethiopian Airlines, el 10 de marzo, que provocaron en total la muerte de las 346 personas a bordo.
Boeing, con sede en Chicago, cumplió este miércoles con la fuertemente rebajadas estimaciones de ganancias trimestrales de Wall Street, en gran parte debido a la detención de las entregas de los 737 MAX y una desaceleración en la producción.
La compañía dijo que solo la desaceleración de la producción le ha costado US$1.000 millones hasta el momento, ya que un nivel más bajo de producción significa que el fabricante de aviones tiene que pagar más por las piezas, que tienen un precio de acuerdo al volumen de compra de Boeing.
Boeing también reservó recursos para cargos no especificados relacionados al desarrollo de un arreglo de un cuestionado software de su avión 737 MAX y en la capacitación de pilotos.
"Si hay algo que podamos hacer para que los programas de desarrollo de aviones o el proceso de certificación sean mejores y más seguros, lo adoptaremos", sostuvo el presidente ejecutivo, Dennis Muilenburg, a analistas en una conferencia telefónica.
Una imagen más completa del impacto de los accidentes no surgirá hasta el final del segundo trimestre, ya que los recortes en la producción del modelo 737 MAX comenzaron a mediados de abril.
Boeing dijo este miércoles que aceleró la producción de su 787 Dreamliner a 14 aviones por mes desde los 12 del primer trimestre, mientras sigue trabajando para que se realicen este año las pruebas de vuelo del 777X, que sería entregado en 2020.
Las acciones de Boeing subían cerca de 1% a las 1721 GMT.
Boeing dijo que emitirá un nuevo pronóstico financiero cuando tenga más claridad sobre los temas que rodean al 737 MAX. En enero, la empresa aseguró que esperaba ingresos anuales entre US$109.500 millones y US$111.500 millones y ganancias estructurales por acción en un rango de US$19,90 y US$20,10.
La compañía sostuvo también que recompró US$2.300 millones en sus acciones en el último trimestre, lo cual ocurrió antes de mediados de marzo. Boeing recompró US$9.000 millones de sus papeles el año pasado.