Pekín ha llevado a cabo una ofensiva muy publicitada contra lo que las autoridades calificaron de contenido sucio e indecente que abrumaba los móviles y la red de internet del país, amenazando la salud emocional de los niños.
Pekín. China cerró más de 60.000 páginas web pornográficas este año y arrestó a casi 5.000 sospechosos en el proceso, dijo este jueves un portavoz del gobierno, que prometió que no abandonarían la lucha contra el material considerado obsceno.
Pekín ha llevado a cabo una ofensiva muy publicitada contra lo que las autoridades calificaron de contenido sucio e indecente que abrumaba los móviles y la red de internet del país, amenazando la salud emocional de los niños.
Sus críticos acusan al obierno chino de profundizar la ofensiva, lanzada el pasado diciembre, y reforzar la censura en general, y dicen que la iniciativa ha afectado a muchas webs con contenido políticamente sensible o incluso generado simplemente por usuarios.
Pero Wang Chen, responsable de la Oficina de Información del Consejo Estatal, u oficina del portavoz del gabinete, señaló que la ofensiva era vital.
"Nuestra campaña ha sido un gran éxito y esto no se ha logrado con facilidad", dijo en una rueda de prensa.
"Hemos convertido el entorno de internet en mucho más limpio que antes, ya que había mucha pornografía disponible", agregó.
"Hemos cambiado esta situación y esto ha sido bien recibido por muchos sectores de toda la sociedad", dijo Wang. "Pero nuestra campaña no ha acabado. Esta será una batalla larga", apuntó.
"Mientras haya gente con malas intenciones que quiera propagar información violenta o pornográfica tendremos que continuar nuestra campaña de reprimir con firmeza la propagación de dicha información", agregó.
De los 4.965 sospechosos, 1.332 personas recibieron "castigo penal", y 58 de ellos fueron encarcelados durante cinco años o más, dijo Wang.
El Gobierno comprobó el contenido de 1,79 millones de páginas web y borró 350 millones de artículos, fotos y piezas de vídeo pornográficas e indecentes, añadió.
Con una cifra estimada de 450 millones de internautas a finales de noviembre, China tiene una población online de mayor tamaño que ningún otro país. Al Gobierno le preocupa que internet pueda convertirse en una vía peligrosa para ideas e imágenes amenazantes.
China ha bloqueado varias páginas web y servicios populares, como YouTube, Twitter, Flickr y Facebook, así como páginas chinas para compartir contenido.
El Gobierno les acusa de tener contenido dañino para la seguridad de China y de violar leyes chinas, incluyendo imágenes de protestas en regiones sensibles como Tíbet.