El comité de la norteña región de Coquimbo avaló el proyecto de la empresa local Andes Iron valorado en US$ 2.500 millones, que ha sido dilatado por años en medio de la fuerte oposición de grupos sociales y ecologistas.
Una comisión de evaluación ambiental chilena aprobó este miércoles el controvertido proyecto de hierro y cobre Dominga en el norte del país, que ha sido dilatado por años en medio de la fuerte oposición de grupos sociales y ecologistas.
En abril, un tribunal ambiental dio un respiro a la iniciativa de US$ 2.500 millones que ha sido demorada por años al solicitar que se repitiera la votación de su permiso.
El comité de la norteña región de Coquimbo avaló el proyecto de la empresa local Andes Iron con 11 votos a favor y uno en contra.
"El proyecto Dominga cumple con la normativa ambiental aplicable", dijo Claudia Martínez, directora regional del Servicio de Evaluación Ambiental, citada por el diario local El Mercurio.
Quienes se oponen a la iniciativa denuncian que Dominga, que se ubicaría 60 kilómetros al norte de la central ciudad de La Serena -cerca de reservas ecológicas-, causaría un grave daño ambiental en la región.
"No quieren proteger el medio ambiente ni a las comunidades, solo velan por los intereses económicos", dijo en Twitter el diputado Gonzalo Winter, del izquierdista Frente Amplio.
"Aprobación de Dominga demuestra desconexión absoluta del gobierno con gravísima crisis climática, ratificada en informe de la ONU", agregó.
La empresa negó nuevamente las acusaciones en su contra y subrayó la adopción de prácticas sustentables como el uso de agua de mar en sus procesos, para no afectar la disponibilidad del escaso recurso en la zona.
"Reiteramos nuestro compromiso con el cuidado del patrimonio ambiental de la zona, el cual vamos a proteger y no a destruir como señalan algunas personas sin ningún sustento", dijo Andes Iron en un comunicado tras la aprobación.
El proyecto adquirió matices políticos, ya que mientras algunos denunciaron una vinculación inicial del proyecto con el presidente Sebastián Piñera, otros señalaron que se ubica cerca de terrenos de propiedad de la expresidenta Michelle Bachelet.
El presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Diego Hernández, dijo que el proyecto ha tenido un período "excesivo" de tramitación y que, pese a haber cumplido con las exigencias requeridas, todavía está en riesgo.
"Aún no cuenta con la certeza de que pueda llegar a materializarse, ya que seguramente los opositores insistirán en impedir su materialización", afirmó.
La iniciativa busca producir anualmente 12 millones de toneladas de concentrado de hierro y 150.000 toneladas de concentrado de cobre.