La mayor empresa de México dijo que la pérdida en cambio neta de US$19.956 millones constituye una partida de valuación "virtual" y no implica salidas de flujo de efectivo. El peso se desplomó un 25,3% en el primer trimestre.

Ciudad de México. La petrolera estatal mexicana Pemex reportó una pérdida neta de 562.130 millones pesos (US$23.913 millones) en el primer trimestre, vapuleada principalmente por la depreciación del peso mexicano frente al dólar y la caída del precio del crudo.

La mayor empresa del país dijo este jueves que la pérdida en cambio neta de US$19.956 millones constituye una partida de valuación "virtual" y no implica salidas de flujo de efectivo. El peso se desplomó un 25,3% en el primer trimestre.

La pérdida neta de enero-marzo es un 1,474% mayor a la del mismo lapso del 2019, medida en pesos, y supera cómodamente los US$18.300 millones de todo el año pasado para la petrolera más endeudada del planeta.

Pemex dijo que las ventas totales disminuyeron un 20% interanual en los primeros tres meses del año a US$12.084 millones por una baja del 21% en las ventas nacionales y del 19% en las de exportación por la caída del precio de la mezcla mexicana de exportación.

A ello se sumaron menores precios de referencia de gasolina y diésel y la disminución de volúmenes en las ventas locales y externas por las medidas de confinamiento para reducir el impacto de la pandemia del coronavirus.

La compañía dijo que su deuda financiera cerró el trimestre en US$104.800 millones y aumentó un 24% comparada con el cierre del 2019 debido a la depreciación del peso. Informó que en diciembre el tipo de cambio usado fue de 18.4520 pesos/dólar y en marzo del 2020 de 23.5122 pesos/dólar.

La estatal, que recientemente perdió el grado de inversión, dijo que los apoyos del Gobierno para este año suman el equivalente a US$6.562 millones entre reducción de impuestos, aportaciones presupuestadas y el cobro de un pagaré de pasivo laboral, con lo que espera mejorar sus cuentas.

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha reiterado que recibió a Pemex al borde de la quiebra y que su administración hará todo lo posible para sanear sus cuentas y aumentar la producción. No obstante, la compañía sigue presentando ingentes pérdidas y no logra repuntar el bombeo de hidrocarburos.

Directivos de Pemex dijeron en una llamada con analistas que ven que la mezcla petrolera de exportación ronde este año un promedio de US$30-32 por barril (dpb), muy por encima de los precios actuales, y afirmaron que el costo promedio ponderado de producción es de 14.06 dpb.

Además dijeron que trabajan en un ajuste a la cartera de inversiones, que se dará prioridad de fondos a los proyectos más rentables, que se renogociarán contratos para lograr ahorros y que no se acudirá a mercados financieros de deuda a levantar capital sino se buscarán otras opciones, que no detallaron.

La firma dijo que la producción de crudo y condensados alcanzó 1,76 millones de barriles diarios en el trimestre, 63.000 bpd más que en mismo lapso 2019, y que el procesamiento de petróleo en las refinerías fue de 542.000 bpd, ligeramente por debajo del nivel alcanzado en el mismo lapso 2019 y muy lejos del millón que prometió el presidente para fines del año pasado.