Ford, gracias a la consultoría de diseño y pruebas de 3M, ha desarrollado un nuevo respirador purificador de aire y en colaboración con la UAW, ahora produce a nivel mundial protectores faciales en la planta de transmisión Van Dyke para uso interno y busca la certificación para uso médico.
Ciudad de México. – Ford Motor Company está ampliando sus esfuerzos para diseñar, además de producir, equipos y suministros médicos que tanto necesitan los trabajadores de la salud y los pacientes que luchan contra la enfermedad del coronavirus.
En este sentido, sumado a la producción actual de más de 3 millones de protectores faciales en Plymouth, Michigan, Ford comenzará el día de hoy (martes 14 de abril) la producción de respiradores purificadores de aire motorizados diseñados por la misma marca del óvalo azul. Asimismo, también está produciendo protectores faciales y liderando un esfuerzo para escalar la producción de productos reutilizables como batas para los trabajadores de la salud. Por último, Ford comenzó a proporcionar apoyo a Thermo Fisher Scientific para expandir rápidamente la producción de kits de recolección de COVID-19 para detectar el virus.
"Sabíamos que, para hacer nuestra parte en el combate contra el coronavirus, teníamos que actuar rápido y unir fuerzas con expertos como 3M para expandir la producción de equipos y suministros médicos que se necesitan con urgencia, mencionó Jim Baumbick, vicepresidente de administración de la línea de productos de Ford. En solo tres semanas, como parte del Proyecto Apollo, hemos implementado nuestro talento de diseño, compra y producción de clase mundial para comenzar a desarrollar equipos de protección personal y ayudar a aumentar la disponibilidad de ventiladores".
Un nuevo respirador. Desde finales de marzo, los expertos en fabricación, compra y cadenas de suministro de Ford se han integrado en las plantas de producción de 3M para ayudar a aumentar la producción de los productos que se necesitan con urgencia.
Con esta ayuda adicional, 3M junto a Ford pudieron aumentar la producción de respiradores purificadores N95 en las instalaciones de fabricación de 3M en EE. UU.
"3M se está dedicando a ayudar a proteger a nuestros heroicos trabajadores de atención médica a nivel mundial, incluido el intercambio de nuestra experiencia científica para aumentar el suministro necesario de equipos de protección personal. Nos enorgullece apoyar a Ford en este esfuerzo, ya que nos han apoyado a aumentar la fabricación de productos ya existentes y, juntos, hemos diseñado rápidamente un nuevo respirador purificador de aire para ayudar a proteger a estos héroes", dijo Bernard Cicut, vicepresidente de la división de seguridad personal de 3M.
Ford comenzará a producir un respirador con diseño completamente nuevo para ayudar a proteger a los profesionales de la salud que luchan en la primera línea contra el COVID-19. El equipo de Ford Motor Company con el apoyo y la orientación de expertos de 3M redujeron el tiempo de desarrollo de este nuevo producto a menos de cuatro semanas, diseñando rápidamente componentes y prototipos de acuerdo con las pautas federales.
"Al trabajar en colaboración con 3M para combinar rápidamente más de 100 años de experiencia en fabricación e ingeniería de Ford con diseño y experiencia en equipos de protección personal, estamos obteniendo la tecnología que tanto necesitan los trabajadores médicos de primera línea para ayudarlos cuando más lo necesitan", agregó Marcy Fisher, directora global de diseño exterior e ingenieria interior de Ford.
Aproximadamente 90 voluntarios pagados de la UAW ensamblarán el nuevo respirador en las instalaciones de Ford en Vreeland cerca de Flat Rock, Michigan, con la capacidad de generar 100,000 o más de estos productos.
Por su parte, el nuevo diseño incluye una capucha junto con un protector facial para cubrir las cabezas y los hombros de los profesionales de la salud, mientras que un sistema de filtro de alta eficiencia (HEPA, por sus siglas en inglés) proporciona un suministro de aire filtrado por hasta 8 horas. El sistema de soplador de aire, similar al ventilador que se encuentra en los asientos ventilados del modelo F-150, funciona con una batería recargable y portátil, lo que ayuda a mantener el respirador en uso constante.
Por otro lado, el equipo de desarrollo espera que el diseño del respirador cumpla con el protocolo de uso limitado del Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH) para responder a la emergencia de salud pública de COVID-19, con aprobación anticipada, para fines de abril.
En espera de aprobación, 3M distribuirá los respiradores recientemente diseñados a través de su red logística en los Estados Unidos para ayudar a llevar estas tecnologías de manera rápida y eficiente a los trabajadores de la salud que las necesitan con urgencia. Aunado a esto, 3M y Ford donarán cualquier beneficio que obtengan de la venta de este nuevo producto a organizaciones sin fines de lucro relacionadas con COVID-19.
Producción de Protectores Faciales. Mientras tanto, Ford está produciendo protectores faciales para uso a nivel mundial y para uso médico en su planta de transmisiones en Van Dyke. Estos protectores faciales ayudan a retrasar lentamente la propagación del virus a otras personas que puedan estar infectadas y no lo sepan.
Los CDC ahora están alentando a toda la población de EE.UU. a usar protectores faciales y frenar así la propagación del virus.
Los equipos a nivel global de fabricación y compras de Ford obtuvieron rápidamente los materiales y equipo necesarios a través de su red de fabricantes de todo el mundo. La producción de protectores faciales comenzó a principios de esta semana.
Aproximadamente 30 voluntarios pagados por la UAW empezaron a desarrollar protectores faciales en la sala desinfectada ISO Class 8, que es un ambiente controlado con los más bajos niveles de contaminantes, permitiendo la producción segura de protectores faciales para uso médico. Eventualmente, aproximadamente 80 voluntarios pagados por la UAW harán protectores faciales en la medida que aumente la producción.
“Miembros de la UAW de Ford continúan su voluntariado para trabajar durante este momento difícil a medida que nos expandimos en las instalaciones ubicadas en frente de Flat Rock para hacer respiradores y en la planta de transmisiones de Van Dyke para hacer protectores faciales para uso médico" dijo Gerald Kariem, vicepresidente del departamento de UAW de Ford. "El UAW también continúa trabajando con Ford para seguir estrictas pautas de los CDC e ir más allá de las protecciones para estos miembros que orgullosamente se ofrecen como voluntarios para servir a sus comunidades y a su nación".
Producción de batas. Para ayudar a proteger aún más a los trabajadores de la salud, Ford lidera los esfuerzos para fabricar batas reutilizables con su proveedor de bolsas de aire, Joyson Safety Systems. El acelerado proyecto ha creado batas reutilizables desarrolladas a partir del material que se utiliza en las bolsas de aire en los vehículos de Ford.
La producción de batas ha alcanzado la cifra de 75 mil batas por semana y se alcanzará más de 100 mil batas para la semana del 19 de abril en adelante. Para el 4 de julio, Joyson Safety Systems, proveedor de Ford, cortará y coserá 1.3 millones de batas, las cuales se someten a pruebas dentro de los estándares federales y son lavables hasta 50 veces.
Ford trabajó con Beaumont Health en la zona metropolitana de Detroit para diseñar rápidamente el patrón de la bata y probar el tamaño durante el ajuste y pruebas de función. Ya se han entregado más de 5 mil batas a hospitales.
"La necesidad de proteger a nuestros equipos médicos ha aumentado: la producción de batas de Ford no podría llegar en un mejor momento durante esta crisis", dijo David Claeys, presidente de los hospitales de Beaumont Health en Dearborn y Farmington Hills. "Nuestros trabajadores de atención médica de primera línea trabajan las 24 horas para tratar a los pacientes con COVID-19 y necesitamos los suministros necesarios para apoyarlos".
Colección de Kits para Pruebas de COVID-19. Ford está ayudando a escalar la producción de kits para las pruebas COVID-19 en Thermo Fisher Scientific.
El equipo de ingeniería de Thermo Fisher en Lenexa, Kansas, sabe que su experiencia, combinada con la del equipo de producción de la planta de ensamble de Kansas City de Ford, podría ayudar a instalar maquinaria adicional para la producción de kits. El equipo de Ford también ha ayudado a Thermo Fisher a adaptar la maquinaria que actualmente maneja para la producción para producir viales de plástico requeridos para la recolección de pruebas de coronavirus.
"Los ingenieros de Ford aportaron una nueva perspectiva para la expansión de la producción, y juntos, vamos a triplicar la cantidad de kits de recolección que podemos entregar cada semana a partir del 20 de abril", dijo John Reuss, director senior de negocios de microbiología de Thermo Fisher. "Es genial ver que diferentes industrias se unan para resolver un problema común.
Esfuerzos adicionales. Estamos haciendo todo lo que podemos para expandir la producción y disponibilidad de equipamiento de protección personal para tratar de mantener a salvo en la lucha contra la enfermedad del COVID-19 a los verdaderos héroes – el personal médico -, y nuestras comunidades, comentó Adrian Price, director de ingeniería para la manufactura de vehículos.
La planta de componentes de Rawsonville (Mich.) en colaboración con GE Healthcare, está en marcha para transformar una parte de la planta para la producción de un ventilador de una tercera empresa, que se espera comience la semana del 20 de abril. Construidos por voluntarios pagados de la UAW, el objetivo es producir 50,000 ventiladores modelo AE antes del 4 de julio para ayudar a los pacientes con COVID-19.
Las actividades de preproducción de ventiladores también están en marcha en Reino Unido, donde Ford y un consorcio de la industria se están preparando para fabricar ventiladores de Penlon. Ford proporciona la capacidad de ingeniería de producción, liderazgo de proyectos, soporte de compras y montaje de los ventiladores en su planta de motores en Dagenham. Esta producción ayudará a satisfacer la demanda de 15.000 ventiladores solicitados por el gobierno de Reino Unido.
