El Banco Público nació con un capital de US$127 millones sobre la base del privado Banco Unión, que ya controlaba el Estado desde que lo intervino por quiebra en la década pasada.
El Gobierno de Bolivia consolidó este viernes la creación de un banco estatal que competirá con la banca comercial privada, en una medida que buscaba romper lo que autoridades definieron como "oligopolio financiero" en el empobrecido país.
El Banco Público nació con un capital de US$127 millones sobre la base del privado Banco Unión, que ya controlaba el Estado desde que lo intervino por quiebra en la década pasada.
Fue creado mediante una ley que el presidente indígena Evo Morales firmó este jueves y entró en vigencia al día siguiente.
Por su capital, constituido por 77 millones que tenía registrados el Unión y US$50 millones que le transfirió este viernes el Tesoro General de la Nación, el Banco Público se ubicará entre los cuatro más grandes del país y aspira a ser el mayor a corto plazo, dijo el ministro de Economía, Luis Arce.
"Hemos roto el oligopolio en el sistema financiero", dijo Arce, explicando en conferencia de prensa que el Gobierno decidió ser protagonista en un sistema financiero controlado por "un grupo reducido de banqueros privados" que fijaba tasas de interés y mecanismos de crédito "no competitivos".
La creación del banco estatal parecía estar en línea con la estatización de la economía que impulsa Morales desde que llegó al poder en 2006 y que ya incluyó la nacionalización de empresas que habían sido privatizadas en las décadas pasadas, como las de hidrocarburos, telecomunicaciones, minería y generación eléctrica.
Bolivia tuvo bancos estatales de servicios generales y de fomento a la minería y la agricultura que fueron cerrados por quiebra por gobiernos liberales en la década de 1990.
Arce señaló que el nuevo banco prestará servicios financieros al aparato estatal y buscará captar clientes entre pequeños productores agrícolas y empresas pequeñas y medianas, así como al público en general, con ofertas de créditos blandos.
"Vamos a estar entre los primeros bancos del sistema nacional, sin duda alguna, demostrando que el Estado sí sabe manejar (...) una entidad financiera y demostrando que el Estado es capaz, como lo ha hecho todo este tiempo, de mostrar signos e indicadores sumamente positivos de gestión", añadió.
La banca boliviana, que vive una expansión paralela a la de la economía, registraría en 2012 su octavo año consecutivo de ganancias récord, con utilidades totales cercanas a US$300 millones, según proyectó a principios de diciembre la gubernamental Autoridad del Sistema Financiero (ASFI).
El sistema bancario comercial boliviano está compuesto por 12 bancos privados -incluidos dos extranjeros-, 12 mutuales de ahorro y préstamo, una veintena de cooperativas de ahorro y préstamo y ocho fondos financieros privados, según la ASFI.