El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quien ha criticado por su elevado costo el multimillonario proyecto asegurando que está plagado de corrupción, acudió temprano a una de las más de 1.000 mesas de votación en el país.
Ciudad de México. El futuro gobierno de México inició este jueves una consulta pública sobre si se continúa con la controversial construcción de un nuevo aeropuerto capitalino o si se moderniza una existente base aérea militar, una decisión que tiene en vilo a mercados e inversionistas.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ha criticado el multimillonario proyecto en marcha por considerarlo costoso y plagado de hechos de corrupción, por lo que puso sobre la mesa una propuesta alterna de uno de sus más cercanos colaboradores en materia de construcción.
"La gente está contenta porque está participando (...) Pueden estar tranquilos los financieros, los corruptos no", dijo el futuro presidente tras votar en la consulta, para la cual se han instalado más de mil mesas.
"Lo que se decida de manera democrática y libre va a ser respaldado por el gobierno y los contratos en la construcción del aeropuerto en Texcoco, en el caso de que se escogiera por la decisión de la mayoría de la gente Santa Lucía, van a ser respaldados, protegidos", agregó el futuro mandatario, que tomará las riendas del país el 1 de diciembre.
Una de las opciones en la consulta de cuatro días es continuar con el proyecto NAICM (Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México) de unos US$13.300 millones que se construye desde 2015 en el lecho drenado del lago Texcoco y en el que participa un grupo de empresarios, entre ellos, el magnate Carlos Slim.
La otra alternativa es conservar el saturado aeropuerto capitalino actual y reacondicionarlo, junto con el aledaño de la ciudad de Toluca y construir dos pistas más en la base de Santa Lucía, aledaña a la capital, por un monto total aún no precisado que López Obrador ha dicho que sería mucho menor.
Entre las dudas. La industria aeronáutica, cámaras empresariales y organismos privados apoyan el NAICM al igual que analistas financieros, quienes aseguran que la cancelación del proyecto, el mayor del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, enviaría una mala señal a la inversión privada local y extranjera.
El español BBVA, que opera a BBVA Bancomer, el mayor banco del país, consideró difícil creer que una obra de esas dimensiones pueda frenarse.
"Es difícil creer que un proyecto del tamaño del NAICM y con el 30% del progreso no continúe", destacó en un reporte reciente subrayando la reacción potencial del mercado en caso de cancelarlo: de un efecto casi nulo en las finanzas públicas a un shock de confianza negativo.
Tras las elecciones presidenciales de julio en las que López Obrador arrasó, los mercados se han mantenido relativamente tranquilos, atentos a su discurso sobre sus políticas económicas y combate a la corrupción, pero la decisión sobre el futuro aeropuerto está despertando dudas.
En lo que va del mes, el peso mexicano acumula una pérdida de un 3,9% en medio de volatilidad derivada de factores externos pero atizada por la incertidumbre sobre el futuro del millonario proyecto.
"Por el momento los mayores riesgos para el tipo de cambio surgen de la incertidumbre relacionada con las políticas públicas y la manera en que podría tomar las decisiones la siguiente administración en México", dijo Banco BASE en un reporte.
La consulta no está avalada por instituciones públicas como el organismo electoral y es blanco de fuertes críticas por los temores a que no se conduzca correctamente. El nuevo gobierno espera que participen entre 500.000 y un millón de personas, en el país de unos 126 millones de habitantes.
La fundación Arturo Rosenblueth -una institución mexicana sin fines de lucro dedicada a proyectos tecnológicos- contará los votos y dijo el jueves que el resultado podrá conocerse la noche de este domingo.
