Las nuevas instalaciones estarán situadas en el puerto de Salina Cruz, Oaxaca y en el puerto de Coatzacoalcos, en Veracruz y potenciarán la actividad de uno de los corredores interoceánicos locales.
El gobierno federal invertirá en 2022 poco más de 4.000 millones de pesos (alrededor de US$ 194 millones) para diseñar, construir y equipar dos terminales especializadas de contenedores “de alto rendimiento” que facilitarán la actividad comercial del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
La de mayor monto, 2,277.3 millones de pesos (US$ 110 millones) estará en el puerto de Salina Cruz, Oaxaca, y tendrá una superficie de 38 hectáreas, con un muelle marginal de 800 metros que permitirá el atraque de dos embarcaciones al mismo tiempo, además de una capacidad estática de 25,000 TE (contenedores de 20 pies) y capacidad dinámica de 1,3 millones de TEU anuales.
En el Golfo de México, en el puerto de Coatzacoalcos, en Veracruz, se instalará la otra terminal que requerirá de 1,812.2 millones de pesos con características prácticamente iguales.
Con base en la información de las administraciones portuarias integrales de Salina Cruz y Coatzacoalcos, que tendrán a cargo los proyectos, el desarrollo de las terminales serán dos etapas, y el crecimiento y ampliación de servicios estará asociado a las proyecciones de carga estimadas y a los recursos disponibles (estudios básicos, complementarios o de apoyo para las obras, autorización y liberación de presupuestos, permisos y licencias de construcción, etc.).
Para empezar, el próximo año está contemplado el arranque de la etapa de conformación de plataforma y dragados.
Con estas dos obras, que forman parte de los proyectos estratégicos de infraestructura del gobierno actual, se busca también detonar la industria de la construcción, la cual no ha logrado concretar su recuperación tras el impacto de la pandemia del COVID-19 que se sumó a la baja actividad que venía mostrando desde principios de 2019.
Entre los efectos colaterales del corredor interoceánico se encuentran: la modernización del ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), de los puertos referidos, el fortalecimiento de la infraestructura carretera y de caminos rurales, así como la red portuaria y se construirá un gasoducto para abastecer a empresas y consumidores domésticos.
Además, se crearán polígonos a lo largo del Istmo de Tehuantepec que contarán con incentivos para atraer inversión que detone el desarrollo económico y social de la región con base en las vocaciones productivas con mayor potencial.
Mayor competitividad
De acuerdo con información del CIIT, la nueva infraestructura de las terminales facilitará que las empresas navieras internacionales puedan incursionar en estos puertos y operar grandes volúmenes de carga y descarga de contenedores y, por otro lado, los usuarios de las vías de la red ferroviaria asignadas al FIT puedan recibir un servicio seguro y eficiente en el traslado de sus mercancías entre estos dos puertos y en sus conexiones con el resto del país.
Para 2022 ya se tiene contemplados recursos presupuestales, correspondientes a la primera etapa. Sin embargo, entre los factores de riesgo para continuar los trabajos está la posibilidad de que “la Cámara de Diputados no apruebe el Presupuesto de Egresos de la Federación para los años correspondientes” o que no exista disponibilidad para la aplicación de los recursos por parte de las dos administradoras portuarias.
También se contempla “que no se realicen oportunamente o en forma los trámites y gestiones necesarias para cumplir con las disposiciones que marca la Unidad de Inversiones de la SHCP en lo referente al registro o actualización del Proyecto en la Cartera de Programas y Proyectos de Inversión que integra esta Secretaría, o en igual sentido los correspondientes ante las autoridades local o ambiental para el otorgamiento de las licencias y/o permisos que en su caso se requieran motivo de las obras de construcción del proyecto”.
*Foto: Puerto de Coatzacoalcos/ Gobierno de México